viernes, 9 de abril de 2010

EL MARAVILLOSO VIAJE HACIA ATLANTA EEUU.


Si asi como lo leen, esa es la hora exacta en la que sale nuestro vuelo a USA.
Este jueves 15 de abril a las 2:15pm con la Aerolinea TACA PERU, estamos volando par los Estados Unidos.


Eh aqui el itinerario:


Fecha Jueves 15 de ABRIL del 2010


Línea Aérea: TACA AIRLINES Vuelo: 0032


Desde: Lima Sale: 14:15


Hacia: San Jose, Costa Rica Llega: 16:53


Tiempo de Vuelo: 03 horas 38 minutos Millaje: 1600


Codigo Aerolínea: X55G8T Comida: Almuerzo


Equipo: AIRBUS JET 120-180 STD SEATS Asiento(s): No Asignado


Vuelo operado por: TRANS AMERICAN AIRLINES - TACA PERU
Fecha Jueves 15 de ABRIL del 2010


Línea Aérea: LACSA Vuelo: 0690


Desde: San Jose, Costa Rica Sale: 17:40


Hacia: Miami Llega: 22:30


Tiempo de Vuelo: 02 horas 50 minutos Millaje: 1123


Codigo Aerolínea: X55G8T Comida: Cena


Equipo: EMBRAER EMB E90 JET 94-106 ST Asiento(s): No Asignado


Vuelo operado por: TRANS AMERICAN AIRLINES - TACA PERU
AMERICAN AIRLINES 16APR MIAMI FL ATLANTA GA 1055A 1250P


AA 1664 FRIDAY MIAMI INTL HARTSFIELD JAC


O ECONOMY AIRCRAFT: BOEING 737-800
NOTAS:
* Una maleta de bodega con no mas de 20 kilos


* Una meleta de mano con no mas de 5 kilos


(A menos que quieran pagar el exeso)
* Con los que están viviendo por nana, nos encontramos en la esquina de la primera entrada a la alameda, el jueves 15 entre las 9:00 a 9:30 am. ( Por favor no llegar tarde pues tenemos que estar en el aeropuerto 3 horas antes del vuelo pare registrar maletas. Si alguno piensa llegar tarde, piense en la posibilidad de perder su vuelo)


* Con los que viven en Lima y les resulte mas cerca irse directo al aeropuerto, planifiquen llegar a mas tardar las 11:45 am al aeropuerto y nos encontramos en la aerolínea TACA -PERU a esa hora.
* Es primavera en USA y se acerca el verano así que lleven ropa adecuada a la estación, lo mas poco posible pues aya cuesta relativamente barato.
Sin más compañeros, ahí nos vemos.


Un servidor,
Freddy Miguel Sanchez Campos


Coordinador de colportores Southern Union en la UPeU


fremisc3@hotmail.com / fremisc3@gmail.com


Claro red: 989288240 / Mov. 990413608


miércoles, 7 de abril de 2010

DISPOSITIVOS INTRAUTERINOS

¿Es aceptable desde el punto de vista bíblico el uso de dispositivos intrauterinos como medio de planificación familiar? Esta medida evita la implantación del óvulo fertilizado. ¿No es eso equivalente al aborto? — Boaz Adegu, Universidad de Nairobi, Kenya

Los dispositivos intrauterinos se utilizan para evitar la concepción. Cuando se los coloca directamente dentro del útero y se los deja allí durante cierto tiempo, provocan un leve proceso inflamatorio en el útero que evita, en la mayoría de los casos, la implantación de cualquier óvulo fertilizado en la pared del útero, impidiendo el embarazo. Para quienes piensan que la vida se inicia a partir de la concepción, esto resulta problemático, pues se le estaría negando vida a una “persona” y el caso podría clasificarse como “aborto”.

Sin embargo, al considerar este asunto, se deben tomar en cuenta el mecanismo que establece un embarazo viable. La concepción no es un evento aislado, sino un proceso formado por varias etapas. Cuando el espermatozoide ha depositado su material genético en el óvulo y el óvulo comienza a dividirse en una multitud de células, hay un espacio de tiempo en el cual el óvulo recibe el nombre de “pre-embrión”. En más del 50 por ciento de los casos, el pre-embrión es “abortado” sin intervención o métodos de control de natalidad. Simplemente pasa a través del cuerpo y nunca llega a implantarse.

El pre-embrión puede también implantarse en el útero, pero puede ser abortado espontáneamente más tarde en cuyo caso no se llega a establecer el embarazo.

Más aun, el pre-embrión no es diferenciable; su destino es indeterminado. Puede dividirse y producir dos o más pre-embriones, dotados cada uno de ellos con la capacidad de producir un embarazo viable y, por lo tanto, individuos separados. Como se ha demostrado en estudios con animales, dos pre-embriones (procedentes de dos óvulos fertilizados) pueden fusionarse y convertirse en uno solo. Por razón de las características no diferenciadas del pre-embrión, algunos opinan que todavía no es una “persona” y lo ven en forma diferente que en el caso de que fuera un embrión maduro, cuyas células se han diferenciado en lo que constituyen los precursores de los órganos humanos.

Muchos dan por sentado que la “pastilla” o “píldora” (anticonceptivo oral que contiene hormonas) actúa antes de efectuada la fertilización y por lo tanto no posa problema alguno, siendo que no causa un “aborto” temprano. Contrariamente a este concepto erróneo, los contraceptivos orales actúan de dos maneras. En primer lugar, evitan o reducen la ovulación (la liberación de óvulos de los ovarios). Sin embargo, es posible que aun así se liberen óvulos viables que pueden ser fertilizados por espermatozoides. En segundo lugar, los contraceptivos orales actúan también sobre los tejidos del útero evitando la implantación. Generalmente, no es posible saber cuáles de esas acciones han ocurrido durante un determinado ciclo menstrual. Si uno llega a la conclusión de que hay un problema moral en el uso de dispositivos intrauterinos, también tendríamos que llegar a la conclusión de que también hay un problema moral, en algunos casos, con los contraceptivos orales.

Habiendo considerado algunos aspectos de la fisiología de la concepción, sería conveniente señalar que los actos moralmente apropiados no deben basarse en fenómenos biológicos desconocidos o que son difíciles de entender. Cristo enseñó que el pecado se inicia en la mente. En el contexto del aborto hay una enorme diferencia entre el deseo de limitar el número de hijos en la familia y la elección voluntaria de destruir un embarazo ya establecido. La decisión moral más importante empieza en la mente y la elección subsecuente no debe depender de complejos fenómenos fisiológicos.

Albert Whiting (M. D., Loma Linda University) es el director del Departamento de Salud y Temperancia de la Asociación General de los Adventistas del Séptimo Día. Su dirección es: 12501 Old Columbia Pike; Silver Spring, MD 20904; E.U.A.

EL SUICIDIO EN LA BIBLIA

Hace poco uno de mis mejores amigos se quitó la vida, dejándonos a todos muy impactados y tristes. ¿Qué dice la Biblia sobre el suicidio?

Cuando alguien se quita la vida, deja en la familia y los amigos hondas cicatrices emocionales y provoca sentimientos de soledad, culpabilidad y desorientación. Por razones de espacio, voy a limitar mi respuesta a unas breves observaciones.

Distingamos en primer lugar entre suicidio y martirio, que es la decisión de entregar la vida motivada por convicciones fundamentales e irrenunciables, e incluye actos heroicos de sacrificio propio para preservar otras vidas (por ejemplo, un soldado que cubre con su cuerpo una granada que va a explotar y de ese modo salva a otros). Mientras que el suicidio niega el valor de la vida presente por considerarla insoportable, los otros casos expresan respeto y amor por la vida.

Voy a enumerar los casos de suicidio que se han intentado o realizado, registrados en la Biblia, para entonces hacer algunos comentarios.

1. Casos de suicidio en la Biblia: Abimelec, mortalmente herido por una piedra de molino arrojada por una mujer, pide a su escudero que lo mate para escapar a la vergüenza (Jueces 9:54). Saúl, gravemente herido en batalla, se quita la vida (1 Samuel 31:4). Viendo lo que había hecho el rey, el escudero “se echó sobre su espada, y murió con él” (31:5). Estas muertes fueron motivadas por el temor de lo que podría hacer con ellos el enemigo. Ahitofel, uno de los consejeros de Absalón, se ahorcó al darse cuenta de que se había rechazado su consejo (2 Samuel 17:23). Zimri llegó a ser rey mediante una conspiración, pero al ver que el pueblo no lo apoyaba, entró “en el palacio de la casa real, y prendió fuego a la casa consigo” (1 Reyes 16:18). Judas estaba tan perturbado emocionalmente después de traicionar a Jesús que se ahorcó (Mateo 27:5). Sansón se quitó la vida y eliminó a muchos enemigos al causar el derrumbe de un edificio (Jueces 16:29, 30). Tras el terremoto, el carcelero de Filipos creyó que los presos habían escapado e intentó suicidarse, pero Pablo lo convenció de que no lo hiciera (Hechos 16:26-28).

2. Comentarios sobre estos incidentes: En primer lugar, la mayor parte de estos suicidios ocurrió durante una guerra, y el quitarse la vida era resultado del temor o la vergüenza. En segundo lugar, los otros casos son más personales y reflejan, además del temor, una baja estima propia. En cada incidente, el individuo se encontraba en un estado mental altamente emotivo. En tercer lugar, la Biblia menciona los suicidios sin emitir juicio sobre la moralidad de la acción. Esto no significa que el suicidio sea moralmente correcto; el autor bíblico está simplemente narrando lo ocurrido.

El impacto moral del suicidio puede evaluarse mediante una comprensión bíblica de la vida humana: Dios la creó, y no somos dueños de ella como para usarla y descartarla como nos plazca. El sexto mandamiento también tiene algo que decir sobre el tema. Por lo tanto, un cristiano no debe considerar el suicidio como solución moralmente válida al dilema de vivir en un mundo donde se experimenta dolor físico y emocional.

3. Reflexiones y sugerencias: ¿Qué actitud debiéramos asumir ante el suicidio de un ser amado? En primer lugar, la psicología y la psiquiatría indican que el suicidio a menudo es resultado de una honda conmoción emocional o de desequilibrios químicos relacionados con un profundo estado de depresión y temor. No debiéramos condenar a la persona que ha optado por el suicidio en estas circunstancias. En segundo lugar, la perfecta justicia de Dios toma en cuenta la intensa perturbación que se produce en nuestras mentes agitadas. El nos entiende mejor que ningún otro. Debemos colocar el futuro eterno de nuestros seres amados en sus manos amorosas. En tercer lugar, con la ayuda de Dios, debemos aceptar que quienes intentan suicidarse necesitan auxilio profesional que la mayoría de nosotros no estamos en condiciones de proporcionar. Finalmente, si alguna vez te sientes tentado a poner fin a tu vida, recuerda que hay auxilio profesional disponible, medicamentos que pueden ayudarte a superar la depresión, amigos que te aman y que van a hacer todo lo que puedan para ayudarte, y un Dios que está dispuesto a obrar por medio de otros para darte apoyo mientras caminas por el valle de sombra de muerte. ¡Nunca abandones la esperanza!

Angel Manuel Rodríguez (Th.D., Andrews University) es director del Instituto de Investigaciones Bíblicas de la Iglesia Adventista del Séptimo Día en Silver Spring, Maryland, EE.UU.

Para consultar un artículo anterior sobre este tema, remitirse a Judy Cushman, “El suicidio: Lo que debes saber” (Diálogo 9:1, 1997), o visitar nuestra página: http://dialogue.adventist.org.

LA PENA DE MUERTE

Desde hace ya algún tiempo se viene debatiendo en mi país lo relativo a la pena de muerte. Como cristiano, estoy tratando de llegar a mis propias conclusiones sobre este tópico, pero cuando estudio la Biblia parece que existen contradicciones. Tengan la bondad de resumir la enseñanza bíblica sobre la pena de muerte. ¿Ha tomado nuestra iglesia una posición sobre este asunto?

La Iglesia Adventista no ha tomado una posición con respecto a la pena de muerte, aunque se le ha dado consideración por cuanto tiene relación con nuestra posición de no combatientes en el servicio militar. Algunos presentan el argumento de que nuestra oposición al uso de las armas dentro del servicio militar requiere por ende nuestra oposición a la pena de muerte. Sin embargo, la relación no es tan obvia.

De acuerdo con las Escrituras, un ser humano no tiene la libertad de quitar la vida a otro ser humano. Los conflictos personales, no importa cuán serios sean, no deben solucionarse de esta forma. Este concepto es claro en el Sermón del Monte y en otros lugares. Menos claro es el asunto de defensa propia en situaciones de violencia. El texto hebreo del sexto mandamiento literalmente dice: “No matarás” y se refiere a un acto causado por malicia.

Pero la pena de muerte es contingente en un proceso legal que ha examinado la evidencia y ha determinado si existe o no existe un culpable. El tratar con la violencia de otra persona o personas es el esfuerzo de una sociedad y no de un individuo. En las culturas democráticas, la muerte es reservada solamente para los actos más ofensivos, típicamente el asesinato o asesinato agravado por otras ofensas. La pena de muerte va más allá de una sencilla venganza con el fin de proteger a la sociedad de alguien que es extremadamente peligroso y que ha demostrado violencia en su carácter. Bíblicamente, no existe lugar para el vigilantismo.

Romanos 13:1-7 afirma la legitimidad de la comunidad para organizar y nombrar a personas específicas para actuar a favor de la seguridad del grupo. Este pasaje afirma la legitimidad del gobierno, advirtiendo que las amenazas a la seguridad del grupo conlleva graves consecuencias. Muchos entienden la declaración de Pablo en el versículo 4 como justificación aún en la ejecución de personas desafiantes. Dice así: “Porque es servidor de Dios para tu bien. Pero si haces lo malo, teme; porque no en vano lleva la espada, pues es servidor de Dios, vengador para castigar al que practica lo malo”. La palabra traducida aquí como siervo se aplica en otras secciones a los ministros cristianos. La mayoría de los estudiantes serios de la Biblia incluyen la pena capital dentro de este pasaje. Más allá de este punto surge la pregunta acerca de la participación de alguien en la acción de matar como agente autorizado en una acción militar. Pero esto va más allá de la pregunta inmediata que estamos considerando.

George W. Reid, Ph.D., director del Biblical Research Institute, Silver Spring, Maryland, EE.UU. de N.A.