lunes, 22 de junio de 2009

¿POR QUE ERES ADVENTISTA DEL SEPTIMO DIA?



Si como adventistas se nos pidiera que definiéramos la singularidad de nuestra iglesia, sin duda habría respuestas muy diversas. Algunos mencionarían el reposo sabático; otros podrían hablar de la aceptación del ministerio de Cristo en el Santuario celestial, del ministerio profético de Elena White o inclusive podrían señalar aspectos del estilo de vida, tales como la alimentación, el entretenimiento o el arreglo personal. En cierto sentido, todas estas respuestas están en lo correcto.
Pero existe otra manera de definir el adventismo, y es como movimiento profético. Vemos que el adventismo es único debido a tres características distintivas que aunque ninguna otra iglesia las sostiene, los adventistas aun antes de la fundación oficial de la iglesia en 1863, consideraron que definían a la iglesia.
Esas tres características distintivas describen a los adventistas como el único pueblo que posee:
1. raíces proféticas o historia predicha en Apocalipsis 10.
2. identidad profética definida en Apocalipsis 12.
3. mensaje y misión profética dados en Apocalipsis 14.
Como adventistas no realizamos estas afirmaciones con actitud exclusivista o de jactancia religiosa. No significa afirmar que somos “mejores que”, sino más bien “diferentes de” otras iglesias.
Las raíces proféticas de Apocalipsis 10
En Apocalipsis 10:1-10, el apóstol Juan describe eventos que cobran importancia al analizar las raíces proféticas y la historia del adventismo. Creemos que el “librito” mencionado en los versículos 2, 8, 9 y 10 se refiere al libro de Daniel. Si bien la profecía de Daniel era en primer lugar un mensaje de tiempo, cuando preguntó por el significado de los períodos revelados, se le dijo: “Cierra las palabras y sella el libro hasta el tiempo del fin” (Dan. 12:4). Era evidente que él no necesitaba comprender el mensaje, pero lo que durante siglos permanecería sellado un día sería entendido.
Daniel quería comprender el período de los dos mil trescientos días, al fin del cual el santuario sería purificado. Ese era el único mensaje sellado del libro de Daniel. Siglos después, en visión en la isla de Patmos, se le mostró a Juan un tiempo futuro cuando un ángel poderoso descendería a la tierra, y en su mano tendría un librito abierto –no cerrado ni sellado, sino abierto.
Desde nuestra ventajosa posición en la historia, podemos ver que fue cerca del fin de la profecía de los dos mil trescientos días en 1844 que este ángel con el libro abierto de Daniel hizo exactamente lo que Juan había visto. En el preciso momento predicho, el mensaje profético del ángel rodeó toda la tierra. Como había sido predicho en la visión de Juan, el tiempo profético había alcanzado su momento cumbre.
Al final del siglo XVIII y comienzo del XIX, muchas personas comenzaron a estudiar las profecías de Daniel y Apocalipsis. Al hacerlo, llegaron a la conclusión de que los dos mil trescientos días de Daniel 8:14 culminarían en la década de 1840. Como pensaron que la purificación del santuario descrita por Daniel se refería a la purificación de la tierra por el fuego al momento de la segunda venida de Cristo, concluyeron que Jesús regresaría para esa época. Pronto estas noticias fueron predicadas en diversas partes del mundo.
Para los adventistas en particular, 1844 y los años que le precedieron evocan el nombre de Guillermo Miller. Pero él fue tan solo uno de muchos que durante ese tiempo predicaron sobre el pronto regreso de Jesús. Personas como Manuel Lacunza, Joseph Wolff, Henry Drummond, Edward Irving, Hugh M’Neile y los niños predicadores de Suecia proclamaron también que los grandes períodos proféticos estaban por hallar su cumplimiento, y que entonces –según entendían– Jesús regresaría.
No fue solo en los Estados Unidos o Europa que la gente proclamó este mensaje, sino que circundó el globo. Wolff predicó en el Oriente Medio y en el norte del África (desde Egipto a Afganistán y desde Inglaterra a la India). En 1837 visitó los Estados Unidos. En la India, Daniel Wilson, obispo episcopal de Calcuta, predicó y escribió folletos sobre las profecías de Daniel.1 En Adelaida, Australia, el mensaje de un Salvador pronto a venir fue predicado por Thomas Playford.2 Tan grandes eran las multitudes que sus seguidores tuvieron que construir una iglesia con mayor capacidad.
Al fin del período profético, precisamente como se le había mostrado al apóstol Juan y en el momento predicho por Daniel más de dos mil trescientos años antes, el mensaje fue proclamado alrededor del mundo a viva voz. No es de extrañar que los pioneros adventistas estuvieran tan entusiasmados al darse cuenta de que estaban cumpliendo la profecía.
Apocalipsis 10:10 dice: “Entonces tomé el librito de la mano del ángel y lo comí. En mi boca era dulce como la miel, pero cuando lo hube comido amargó mi vientre”.
Puede ser que no exista mejor resumen de lo que pasó a partir de allí en la historia adventista, que esas palabras proféticas. Los fundadores de la iglesia habían sido todos milleritas; es decir, seguidores de Guillermo Miller, un agricultor bautista que se convirtió en predicador y proclamó que Cristo regresaría entre 1843 y 1844, cuando concluyese la profecía de los dos mil trescientos días. Como adventistas contemporáneos se nos hace difícil imaginar qué preciosa fue la experiencia de esos milleritas al aproximarse el 22 de octubre de 1844, la fecha en que, según sus estudios, finalizaba la profecía de Daniel. La experiencia de ellos fue especialmente dulce durante las últimas semanas y días previos a la fecha señalada. Al leer algunos de sus testimonios, podemos tener una vislumbre de sus sentimientos alegres pero al mismo tiempo solemnes.
Al describir el encuentro campestre de agosto de 1844 en Exeter, New Hampshire, donde se anunció por primera vez la fecha de octubre, José Bates más tarde recordó:
“Cuando ese encuentro llegó a su fin, las colinas de New Hampshire anunciaron el potente clamor que venía el novio y había que salir a recibirlo. A medida que los carros, las diligencias cargadas y los trenes recorrían los diferentes estados, ciudades y aldeas de Nueva Inglaterra, se escuchaba el clamor: Aquí viene el novio. ¡El tiempo es breve! ¡Preparaos! ¡Preparaos!”3 “Como marea creciente –escribió Elena White– el movimiento se extendió por el país. Fue de ciudad en ciudad, de pueblo en pueblo y hasta a lugares remotos del campo, y consiguió despertar al pueblo de Dios que estaba esperando”.4
Finalmente llegó el gran día. Guillermo Miller observó que “aun los burladores malvados permanecieron en silencio” ese día.5 Pero luego sigue diciendo: “El día pasó. Y al día siguiente pareció como si todos los demonios del abismo insondable hubieran sido liberados sobre nosotros. Los mismos que […] habían clamado por misericordia […] ahora se burlaban, mofaban y nos amenazaban de la forma más blasfema”.6
La experiencia que había sido tan dulce en la boca, como había anticipado el apóstol Juan, se volvió terriblemente amarga en el estómago. Como no podemos comprender 
plenamente lo que habrá sido anticipar el regreso de Cristo ese lejano martes 22 de octubre, tampoco podemos comprender la desgarradora desilusión que sufrieron en los días y semanas que siguieron. Hiram Edson fue probablemente quien mejor resumió la experiencia: “Esperamos la venida del Señor hasta que el reloj dio las doce de la noche. El día había pasado; nuestra desilusión se hizo realidad. Nuestras más caras esperanzas y expectativas fueron destruidas, y nos acometió tal espíritu de llanto como jamás habíamos experimentado antes […] Lloramos y lloramos hasta el amanecer”.7
Sin embargo, el capítulo 10 de Apocalipsis sigue diciendo: “Él me dijo: Es necesario que profetices otra vez sobre muchos pueblos, naciones, lenguas y reyes” (Apoc. 10:11).
Por cierto, debido a su desilusión, los pioneros adventistas no comprendieron plenamente este versículo, especialmente la parte que habla de profetizar “otra vez sobre muchos pueblos, naciones, lenguas y reyes”. Poco a poco entenderían la obra mundial que se les estaba asignando. Y también el mensaje más abarcador que debían predicar, que incluía el sábado, el santuario, el estado de los muertos y el mensaje de salud, entre otros.
Este resumen, aunque breve, nos recuerda por qué como iglesia vemos nuestra historia profética anticipada en Apocalipsis 10. Pero esta es solo la primera de las tres características identificadas por la profecía.
La identidad profética de Apocalipsis 12
Apocalipsis 12 cubre un mayor período histórico que cualquier otro capítulo de la Biblia: desde la caída de Lucifer hasta el año 1798 d. C. En el último versículo del capítulo, vemos que la iglesia verdadera de Dios surge de su experiencia del “desierto”. A continuación aparece un pueblo “remanente” que es identificado por dos características:
1. Guardan los mandamientos de Dios (todos los mandamientos), incluyendo el cuarto.
2. Tienen el “testimonio de Jesús”, que en Apocalipsis 19:10 es definido como el “espíritu de la profecía”: una 
renovada concesión del divinamente inspirado don de profecía.
Aunque existen iglesias que guardan el sábado y otras que afirman tener el don de profecía, ninguna de ellas concuerda con las dos características dadas aquí. En consecuencia, como adventistas hallamos nuestra identidad profética en las dos características dadas en Apocalipsis 12:17.
Fue un día de diciembre de 1844 cuando mientras oraba con otras cuatro mujeres, una jovencita de 17 años llamada Elena Harmon experimentó que el Espíritu Santo descansaba sobre ella como jamás lo había hecho antes. Dios había escogido una vez más una mensajera profética. Así como lo había hecho en muchos otros momentos cruciales de la historia de la salvación (Noé antes del diluvio, Juan el Bautista antes del ministerio de Cristo), Dios ahora envió otro mensajero profético. Otro hito crucial de la historia profética había llegado: los grandes períodos proféticos de Daniel y Apocalipsis estaban llegando a su fin; y así como había sido predicho, el pueblo remanente de Dios recibió una vez más el don de profecía.
En 1846, Elena Harmon se casó con Jaime White, y su ministerio se extendería durante un período de setenta años (de 1844 hasta su muerte en 1915, incluiría unas dos mil visiones e incorporaría la autoría de más de cinco mil artículos y 24 libros (además de dos manuscritos inéditos) antes de su muerte.
Hoy día, después de más de ciento cincuenta años de observar el fruto de su labor, puede demostrarse que los consejos que Dios le dio a la iglesia por medio de Elena White son sólidos: han resistido la prueba del tiempo. Toda evaluación sincera de la historia de la denominación revela que la iglesia ha prosperado toda vez que siguió la dirección divina dada a través del espíritu de profecía, y tambaleó en cada ocasión que no lo hizo.
Esto nos lleva a la tercera característica.
El mensaje profético de Apocalipsis 14
Creemos que tenemos un mensaje para el mundo que se halla en Apocalipsis 14:6-12. Hasta donde sé, ninguna otra iglesia está proclamando hoy día “los mensajes de los tres ángeles”. Es digno de destacar que al traducir la Biblia al inglés contemporáneo en una versión especial para católicos, monseñor Ronald Knox incluyó una interesante nota al pie en su traducción de Apocalipsis 14:6.
La mayoría de las versiones suelen identificar los mensajes de los tres ángeles como “el evangelio eterno”. En su traducción, Knox la traduce como “un evangelio final”8 y añade entonces la siguiente nota al pie: “Final significa literalmente eterno. No está claro –dice Knox– por qué se describe así al evangelio predicado por el ángel, pero el contexto sugiere que se trata del último llamado al arrepentimiento ofrecido a los hombres en la historia de este mundo”.9
En relación con este mismo punto, muchos años antes Elena White escribió: “En un sentido muy especial, los adventistas del séptimo día han sido colocados en el mundo como centinelas y transmisores de luz. A ellos ha sido confiada la tarea de dirigir la última amonestación a un mundo que perece. La Palabra de Dios proyecta sobre ellos una luz maravillosa. Una obra de la mayor importancia les ha sido confiada: proclamar los mensajes del primero, segundo y tercer ángeles. Ninguna otra obra puede ser comparada con esta y nada debe desviar nuestra atención de ella”.10
Durante más de ciento sesenta años, como iglesia hemos estado proclamando los mensajes de los tres ángeles. Los dos primeros (la predicación del evangelio “eterno” o “final” con el trasfondo del mensaje del juicio, y el llamado a salir de Babilonia), fueron dados por primera vez por los milleritas, pero después de la desilusión que sufrieron los fundadores de la iglesia, les llevó un tiempo determinar la significación del mensaje del tercer ángel. Después de descubrir la obligación y el privilegio de observar el sábado, pronto entendieron también su significación teológica y profética en relación con el mensaje del tercer ángel.
Elena White escribió: “Cada aspecto del mensaje del tercer ángel ha de ser proclamado en todas partes del mundo. Esta obra es mucho más importante de lo que muchos creen”.11.


Conclusión
Sí; en el fin de los tiempos habrá en esta tierra un grupo de fieles observadores de los mandamientos que se distinguirán de todas las entidades religiosas de tres maneras singulares. Solo los adventistas encajamos exactamente en esta descripción. El hecho de que hayamos sido llamados a dar un mensaje único antes de la segunda venida de Cristo no da lugar a la jactancia ya que el mismo no pertenece a la iglesia, sino a Dios.
Así las cosas, los adventistas tenemos que vivir de manera diferente, actuar en forma diferente y predicar de manera diferente. Muchas otras iglesias están haciendo una buena obra, pero nadie está predicando el evangelio “eterno” o “final” con el trasfondo del mensaje del juicio. Esto debería darnos un sentido de la urgencia de nuestra predicación.
Tenemos como iglesia una obra especial que hacer en el fin del tiempo. Que Dios no permita que perdamos el sentido de nuestro enfoque y de la misión profética, sino que, por el contrario, experimentemos el entusiasmo y el compromiso de los pioneros que entendieron que Dios quería obrar por su medio para culminar su obra aquí en la tierra. Que el mismo sentido de asombro y dedicación sea la experiencia de la Iglesia Adventista actual.
Fuente: AdventistWorld.comAutor: James R. Nix es director del Patrimonio White / White State, en la sede central de la Iglesia Adventista en Silver Spring, Maryland, Estados Unidos.Referencia: 1. L. E. Froom, Prophetic Faith of Our Fathers, vol. 3, pp. 617-622. 2. M. E. Olsen, Origin and Progress of Seventh-day Adventists, p. 103. 3. José Bates, Second Advent Way Marks and High Heaps, 1847, pp. 30, 31. 4. Elena White, El gran conflicto, ed. 2007, p. 397. 5. Carta manuscrita de Guillermo Miller al Dr. J. O. Orr, 13 de diciembre de 1844, citada en F. D. Nichol, The Midnight Cry, p. 250 (CHL ed., p. 266). 6. Ibíd. 7. Hiram Edson, fragmento manuscrito autobiográfico sin fecha que obra en la Biblioteca de la Universidad Andrews, pp. 8a, 9. 8. Msgr. Ronald A. Knox, The Holy Bible, 1944, 1948, 1950. 9. Msgr. Ronald A. Knox, The Holy Bible, Sheed & Ward, Inc., New York, 1956, p. 270, nota al pie sobre Apocalipsis 14:6. 10. Testimonios para la iglesia, vol. 9, p. 17. 11. Alza tus ojos, p. 275.

resumen por gabriel.

¿Por qué eres adventista? ¿Por qué te hiciste Adventista del Séptimo Día? No estoy preguntando cómo te hiciste adventista, no estoy pidiendo tu testimonio, sino ¿por qué eres adventista? ¿Por qué, después de conocer la verdad, continúas siendo adventista?

Existen muchas respuestas, pero las más comunes son las siguientes:
Yo soy adventista porque espero la segunda venida.
Yo soy adventista porque es la iglesia verdadera.
Yo soy adventista porque aquí conocí al Salvador.
Yo soy adventista porque guarda los Diez Mandamientos de Dios.
Yo soy adventista porque guarda el sábado, el verdadero día del Señor.

Estas son respuestas buenas, pero no suficientes. Hasta podría decirse que son respuestas peligrosas.

Si eres adventista porque esperas la segunda venida de Cristo, ¿Por qué no te quedaste en la Iglesia Católica? Ellos también esperan la segunda venida. Por lo menos así lo dice el credo: “Subió a los cielos, está sentado a la derecha de Dios Padre. Desde allí ha de venir a juzgar a los vivos y a los muertos”.Esta esperanza también se encuentra el rezo del “Padre Nuestro” cuando dice: “Venga tu reino”

Si eres adventista porque es la iglesia verdadera, lamentablemente todas las iglesias dicen lo mismo; y con la Biblia en la mano. Tu sabes que “cada panadero alaba su propio pan”.

Si eres adventista porque en la iglesia conociste al Señor Jesucristo, entonces puedes llegar a ser de cualquier otra religión, porque en todas las iglesias cristianas existen personas sinceras que conocen de corazón al Señor Jesucristo.

Si eres adventista porque ella guarda el sábado y los diez mandamientos, pues quiero decirte que la Iglesia Adventista no es la única. Existen:
• Los Israelitas del Nuevo Pacto que guardan los 10 mandamientos y el sábado.
• La Iglesia Bautista del Séptimo día.
• La Iglesias Adventistas de la Reforma.
• Los Movimientos Adventistas separatistas del Séptimo Día (más de 200).

Como notas, ser adventista por estas razones nos vuelve vulnerable a cualquier engaño. No son respuestas seguras. La respuesta correcta a la pregunta ¿por qué eres adventista del Séptimo Día? Es la siguiente:
“Yo soy Adventista del Séptimo Día porque es una iglesia profética”

¿Qué significa que la Iglesia Adventista del Séptimo Día es una Iglesia profética?
1. Significa que es una iglesia que se encuentra profetizada en la Biblia.
2. Significa que las razones de la existencia de la iglesia se encuentran escrita en la Biblia.
3. Significa que la iglesia adventista es el cumplimiento de las profecías de la Biblia.
4. Significa que Dios es el creador y dueño de la Iglesia.
5. Significa que la historia, el mensaje y la organización de la iglesia están escritos en la Biblia.

PROPOSICIÓN: En esta oportunidad te invito a descubrir bíblicamente que la iglesia adventista es una iglesia profética.

ORACIÓN DE TRANSICICIÓN: Vamos a ver que (1) la historia, (2) el mensaje y (3) la organización de la Iglesia Adventista son bíblicas.

I. LA HISTORIA DE LA IGLESIA ADVENTISTA ES BÍBLICA.
A. La partida de nacimiento de la iglesia se encuentra en Daniel 8: 14.

“Y él respondió: "Hasta 2.300 días de tardes y mañanas. Entonces el Santuario será purificado". (Dan 8: 14)

1. La profecía de las 2.300 tardes y mañanas nos lleva a 1.844.
a. Es el certificado de nacimiento de la Iglesia Adventista. En 1844, con el gran chasco, nace la iglesia.
b. Además, también los 2.300 días proféticos dan origen al mensaje de la Iglesia, porque en este año entró nuestro Sumo Sacerdote al Lugar Santísimo en el Santuario Celestial.

2. Esta profecía es reconfirmada con la profecía del Juicio Investigador de:
a. Daniel 7: 9-10:
"Mientras yo miraba fueron puestos tronos, y un Anciano de muchos días se sentó. Su vestido era blanco como la nieve, y el cabello de su cabeza como lana pura. Su trono llama de fuego, y sus ruedas fuego ardiente. Un río de fuego salía delante de él. Millares de millares le servían, y millones de millones asistían ante él. El tribunal se sentó en juicio, y los libros fueron abiertos”.
b. Daniel 9: 13-14
"Seguí mirando en la visión de la noche, y vi que con las nubes del cielo venía como un Hijo de hombre. Llegó hasta el Anciano de días y fue llevado ante él. Y le fue dado dominio, y gloria y reino. Y todos los pueblos, naciones y lenguas le sirvieron. Su dominio es eterno, que nunca pasará, y su reino nunca será destruido".

B. El capítulo 11 de Apocalipsis es un capítulo exclusivo para la Iglesia Adventista.
Es el capítulo del gran chasco ocurrido el 22 de octubre de 1.844.

1. La primera parte tiene que ver con el “librito abierto”.
a. Es el libro de Daniel que estaba sellado en sus días, pero que para 1.844 está abierto.
b. El mensaje del inminente regreso de Cristo, que Guillermo Miller predicara, fue “dulce como la miel”.
c. Pero al amanecer del 23 de octubre de 1.844, cuando Jesús no vino, “amargó el vientre”.

2. La Segunda parte tiene que ver con el juramento que “el tiempo no sería más”.
a. No habría otra profecía con fecha exacta después de 1.844.
b. Nadie debería fijar fecha alguna para el regreso de Jesús.
c. Además, es el anuncio del tiempo del fin y que Jesús viene pronto.

3. La tercera parte tiene que ver con la gran misión.
a. “Es necesario que profetices otra vez” significa que la Iglesia recibía la comisión de ser la portadora de los grandes “misterios proféticos”.
b. “A toda nación”, es la gran misión de predicar el verdadero evangelio a todo el mundo.

C. Las siete etapas de la iglesia de Dios en la historia de Apocalipsis 2 y 3.
Así como una persona en su vida pasa por 7 etapas, así también la iglesia de Dios. Una persona pasa por 7 etapas que son: La infancia, la niñez, la pre-adolescencia, la adolescencia, la juventud, la adultez y, por último, la tercera edad. No son 7 personas, sino 7 etapas de una misma persona. Así también la iglesia pasó por 7 etapas, pero es una sola iglesia. Son 7 etapas de la iglesia de Dios.

1.Las tres primeras Iglesias: Efeso, Esrmirna y Pérgamo:
b.Efeso, la iglesia de los apóstoles. 31 - 100
c.Esmirna, la iglesia de las catacumbas. 100 - 313
d.Pérgamo, la iglesia de la transición con el mundo. 313 – 538

2. Las tres posteriores Iglesias: Tiatira, Sardis y Filadelfia:
a. Tiatira, la iglesia de la apostasía, de la oscuridad. 538 - 1517
b. Sardis, la iglesia de la Reforma. 1517 - 1798
c. Filadelfia, la iglesia de la consolidación. 1798 – 1844

3. La última Iglesia de la profecía bíblica. 1844 - ?
a. Laodicea: “Lao” = Pueblo, “dicea” = Juicio: “El pueblo del juicio”.
b. Es la Iglesia Adventista del Séptimo Día. Es la última iglesia de la profecía.
c. No hay lugar para una octava iglesia.

II. EL MENSAJE DE LA IGLESIA ADVENTISTA ES PROFÉTICO.
A. El mensaje de los 3 Ángeles es sólo predicado por la Iglesia Adventista.

1. El primer ángel dice: (Apoc 14: 6, 7)
“Entonces vi otro ángel que volaba por el cielo, con el evangelio eterno para predicarlo a los que habitan en la tierra, a toda nación y tribu, lengua y pueblo. Decía a gran voz: ´¡Reverenciad a Dios y dadle gloria, porque ha llegado la hora de su juicio! Y adorad al que hizo al cielo y la tierra, el mar y las fuentes de las aguas”.

2. El segundo ángel dice: (Apoc 14: 8)
“Un segundo ángel lo siguió, diciendo: ´¡Ha caído, ha caído la gran Babilonia!, la que ha dado a beber a todas las naciones del vino del furor de su fornicación”.

4. El tercer ángel dice: (Apoc 14: 9-11)

“Y un tercer ángel lo siguió diciendo a gran voz: Si alguno adora a la bestia y a su imagen, y recibe su marca en su frente o en su mano, este también beberá del vino de la ira de Dios, vaciado puro en la copa de su ira”

B. Las profecías bíblicas son entendidas únicamente por el pueblo remanente. ´
1. El evangelio de Cristo, está acompañado por la “revelación de Jesucristo”.
2. La revelación de Jesucristo es el entendimiento de las profecías apocalípticas.
3. El único pueblo que tiene un entendimiento profundo y equilibrado sobre Daniel y Apocalipsis es la iglesia adventista organizada y unida.

III. LA ORGANIZACIÓN TAMBIÉN ES PROFÉTICA (Eze 1: 15-18)
“Mientras yo miraba a los seres vivientes, vi una rueda sobre la tierra, junto a cada ser viviente, una por cada rostro. Las ruedas resplandecían con el fulgor del crisólito. Las cuatro tenían la misma forma. Y parecía como si una rueda estuviera dentro de la otra. Podían moverse en cualquiera de las cuatro direcciones. Y cuando andaban, no se volvían. Sus llantas eran altas y espantosas, llenas de ojos alrededor en las cuatro ruedas” (Ezequiel 1: 15-18)

A. “Una rueda sobre la tierra, junto a cada ser viviente”.
1. “Una rueda”, es una organización, una iglesia organizada.
2. “Junto a cada ser viviente”, los seres vivientes, no significan ángeles u otros seres que viven en la presencia de Dios, sino son las características de un Dios amante y solícito con sus criaturas.
3. Entonces, significa que esta organización está en la inmediata presencia de Dios y bajo sus cuidados.
4. “Sobre la tierra”, significa que no está en el cielo, sino en la tierra.
5. Se refiere a Iglesia Adventista del Séptimo Día organizada.

B. “Las cuatro tenían la misma forma. Y parecía como si una rueda estuviera dentro de la otra”.
1. Que descripción más impresionante de la organización de la iglesia adventista.
2. Aquí están las 4 ruedas: La Asociación General, la Unión, la Asociación/Misión y la iglesia local.
3. “Las cuatro tienen la misma forma”, significa que están bien unidas.

C. ¿Cuál será la mejor organización del mundo?
1. Hace año, se hizo una encuesta en los EE.UU. sobre cuál era la mejor organización del mundo. Ellos descubrieron que la mejor organización del mundo era una Transnacional de Explotación de Petróleo y que la segunda era la Iglesia Adventista del Séptimo Día.
2. Resulta que aquella Empresa de Explotación de Petróleo quebró y dejó de existir, dejando el primer lugar a nuestra iglesia.
3. Dios dice:
“Que nadie albergue el pensamiento de que podemos prescindir de la organización. Esta nos ha costado mucho estudio y muchas oraciones en demanda de sabiduría, de manera que sabemos que Dios ha contestado, para erigir esta estructura. Ha sido edificada por su dirección, en base a mucho sacrificio y conflicto. Que ninguno de nuestros hermanos esté tan engañado como para intentar destruirla, porque entonces introduciréis una condición que ni siquiera soñáis. En el nombre del Señor os declaro que la organización ha de permanecer, fortalecida, establecida, fijada”.

CONCLUSIÓN
La iglesia adventista, no nació por casualidad o por inspiración de un hombre. No es el resultado de la espiritualidad de nadie ni tampoco de la capacidad creativa del hombre. La iglesia Adventista es la iglesia de Dios, es la expresión de su voluntad. Fue profetizada cientos de años antes que existiera.

Todo aquel que es adventista debe dar gracias a Dios por el enorme privilegio de militar en la iglesia. Nadie debe osar en criticarla, derrumbarla y dudar de su elección divina. La iglesia adventista, aunque tiene falencias, es la causa de la atención y el cuidado de Dios. La iglesia es la organización de su mayor consideración.

Cada miembro, cada líder, cada anciano, cada pastor debiera amarla, cuidarla y brindarle su mayor consideración. Sólo así la vida cobra sentido. Cualquier profesión que el ser humano desarrolle, no llena el corazón. Siempre habrá un vacío. Sin embargo, Dios ha establecido su iglesia, que es donde se congregan los que serán salvos, que servirla, amarla y defenderla da sentido a la vida. Servir a Dios haciendo todo cuanto pueda para llevar adelante la misión de la iglesia, para desarrollarla y hacerla crecer proporciona motivación y razón de ser a la existencia.

Cada uno debería preguntarse: ¿Qué sería de mí si no hubiera conocido a Cristo y a su iglesia? ¿Dónde estaría yo si Dios no me hubiera dado el privilegio de ser miembro de la ella? Fuera de la iglesia la vida no tiene objetivo ni razón de ser. Es un camino sin luz y un afán sin motivación.

Pero, desde el momento que conoces la iglesia y te enrolas en ella activamente, entonces la vida cobra su verdadera dimensión. Dios te da una enorme razón de vivir. Se crean en ti objetivos claros, ideas claras y resultados claros. Es por ello, que predicar el evangelio y ganar almas es el mayor de los privilegios. Pero para gozar de estas bendiciones debes mantenerte leal a la iglesia, a sus dirigentes y a su organización. Recuerda que siendo leal a la iglesia eres leal a Dios.

Ahora preguntemos a las otras denominaciones religiosas si su existencia es bíblica:

• ¿Es la Iglesia de “Los Santos de los Últimos Días” una iglesia profética?. ¿En qué parte de la Biblia dice que en 1830 José Smith debía fundar esa iglesia?... En ningún lado.
• ¿Es la iglesia “Testigos de Jehová” una iglesia profética?. En qué parte de la Biblia dice que Carlos Russell debía funda esta iglesia en la década de 1870. En ningún lado.
• ¿En qué parte de la Biblia dice que en 1730, Juan Wesley debía fundar la Iglesia Metodista? En ningún lado.
• ¿Y la iglesia católica? No existe respaldo bíblico. Al contrario, ella aparece recibiendo poder y autoridad del dragón según la Bestia de Apocalipsis 13.
Sin embargo la iglesia adventista, es una iglesia profética y tiene derecho de llevar los nombres de casi todas las iglesias:
• Es una iglesia católica, porque está en más 203 países de los 230 países que la ONU reconoce. Aunque somos mucho menos en número que los católicos, sin embargo tenemos presencia en más países que la iglesia católica. Así que nosotros somos la verdadera iglesia universal, la verdadera iglesia católica.
• Aunque los metodistas asumieron este nombre por la disciplina y el orden que ellos tenían, nosotros los hemos superado con creces. La iglesia adventista es la institución mejor organizada, ordenada y interdependiente que cualquier otra organización del mundo. Por lo tanto somos la verdadera iglesia metodista.
• “Los testigos de Jehová”, ¿son verdaderos testigos? Es cierto que Isaías 43: 12 dice “vosotros sois mis testigo”, pero esta expresión debe estar acompañada con Isaías 58: 13, que menciona que tu serás un verdadero testigo “si retiras tu pie de pisotear el sábado”. Por lo tanto los verdaderos “testigos de Jehová” somos nosotros.
• Si “santo” lo usamos en el sentido que San Pablo lo usa de “escogido” entonces nosotros somos los verdaderos “santos de los últimos días”, más aún si Dios nos ha comisionado para predicar el mensaje de los tres ángeles y reunir un pueblo para su encuentro.

CONSIDERACIONES
A un adventista que lee su Biblia, su folleto de Escuela Sabática y los libros de la Sra. White no lo mueve nadie de su fe ni nadie lo saca de la iglesia. Bueno..., casi nadie. Pero existe una persona que lo puede sacar de la iglesia. ¿Quieres saber quién es?...

Prepárate para saberlo. La persona que te puede sacar de la iglesia puede ser el hermano que se sienta al lado tuyo. Es el hermano o pariente que tú aprecias y que confías en él; y que conoce un poco más de la Biblia y de los Testimonios que tú. Pero tiene un problema, no entiende la elección divina de la iglesia, no entiende por qué es adventista.

Este empieza a “descubrir nuevas luces”, o a escuchar a los disidentes, o dar sus interpretaciones privadas. De esta forma llega a conclusiones diferentes a las que Dios revela a la Iglesia Organizada, de tal manera que empieza a ser pregonero de otra doctrina, de otro liderazgo, de otra organización, de otra forma del uso de los diezmos.

Como no quiere perderse sólo, entonces empieza a persuadirte. Como tú lo aprecias, como te habla del sábado, de la reforma pro saludo salud, de profecías, etc., entonces te empieza a llenar la mente de acusaciones contra la iglesia y contra sus dirigentes. Así empieza la apostasía: la confusión y desconfianza en la iglesia. Recuerda que Satanás tratará de “engañar, si fuere posible, aun a los escogidos” (Mat 24: 24)

Sin embargo, Dios nos llama a permanecer firmes en la fe y no escuchar ningún viento de falsas doctrinas. “El que persevere hasta el fin, ese será salvo”(Mat 10: 22). Por ello, debemos velar por nuestra fe. Mantenernos unidos unos a otros. Seguros que su iglesia es la última iglesia de la profecía Bíblica.

Cada vez que un hermano llegue a tu puerta y te invite a estudiar las profecías a espalda de la iglesia, no aceptes. No es de Dios. Te quiere sacar de la iglesia. No aceptes ni literatura, ni casetes, ni videos, ni nada que no tenga el visto bueno de la iglesia.

Si te dice: “la iglesia no guarda bien el sábado, ven acá con nosotros, acá lo guardamos bien. Acá se guardan los Mandamientos como Dios manda, practicamos la “reforma pro salud” que los pastores no practican”. No vayas. Puede ser en parte cierto lo que critican, pero aquello no los justifica. Es cierto que la iglesia, los pastores y todos necesitamos vivir mejor los grandes principios de la verdad.

Sin embargo, nada justifica a nadie para formar otra organización, criticar a la iglesia, ni sembrar deslealtad. La Biblia no tiene lugar profético para otra organización eclesiástica. Dios no apoyará a nadie que se aparte de la iglesia por muy loables que sean sus intenciones. “Hay camino que parece derecho, pero al fin conduce a la muerte” (Prov 14: 12).

Nuestra única seguridad consiste en permanecer firmes en la iglesia, confiados que Dios es el Creador, Sustentador y Protector de esta iglesia. Dios ha prometido guiar esta embarcación y llevarla hasta el puerto seguro. Hoy es la iglesia militante, mañana será la iglesia triunfante. Triunfa con ella.

“No hay necesidad de dudar, de temer que la obra no tenga éxito. Dios está al frente de ella, y pondrá todo en orden. Si hay que ajustar ciertos asuntos en la sede de la obra, Dios se ocupará de ello, y corregirá todo. Tengamos fe que Dios va a conducir con toda seguridad al puerto al noble barco que conduce al pueblo de Dios”. (Review and Herald, 20 de septiembre de 1892). La Iglesia Remanente, Tercera Sección: La Iglesia Triunfante, capítulo 12, La Asoc. General, p.113

NO TE CONTAGIES


"UN MENSAJE PARA EL ATEO QUE LLEVAS DENTRO"


Definición del ateísmo:
Es la doctrina o posición propia del ateo, quien, según la RAE, niega la existencia de Dios.
El Diccionario de Filosofía de José Ferrater Mora comienza su entrada sobre Ateísmo del siguiente modo:” Ser ateo, o abrazar el ateísmo, es negar que haya Dios, o negar que haya dioses, o negar que haya alguna realidad que pueda llamarse divina, o todas estas cosas a un tiempo”.
El pastor Peña definió al ateísmo en tres conceptos básicos:
1.- La no creencia en seres superiores.
2.- El término proviene del griego αθεος (atheós): 'sin dios'; siendo a: 'no' o 'sin’ y theós: 'dios' (Zeus).
3.- Se define como la no creencia en seres superiores o entidades metafísicas, debido a supuestas faltas de pruebas racionales que demuestren su existencia.
También el pastor Angel Peña mostro una clasificación de los ateos de la siguiente forma:

EL ATEO PRACTICO.- Nosotros podremos decir que creemos en Dios sin embargo nuestra vida no refleja el amor y el carácter divino, pues transgredimos las leyes divinas desobedeciendo a nuestro creador, al pecar y hacer caso omiso de los mandamientos y la voz del Espíritu Santo.

EL ATEO TEORICO.- Es la persona quien argumenta la inexistencia de Dios mediante todo tipo de evidencia “científica”, se basa en teorías científicas tales como el evolucionismo, la generación espontanea, etc. Usando a la misma “ciencia atea” como base-fundamento para sustentar su cosmovisión.
Sin embargo todas las personas tienden a creer en algo, así digan que no creen en Dios, muchos suelen ser supersticiosos o inclusive llegan a creer en el tarot y espiritismo sosteniendo que son con humanos fallecidos con quienes conversan, contradiciendo sus propias teorías.
EL ATEO RELIGIOSO.- Una de las cosas mas peligrosas en las que podemos incurrir los humanos es el decir que creemos en Dios, leer su palabra, escudriñar las escrituras y profecías y predicar a otras personas sobre nuestras doctrinas sin creer firmemente en ellas, como adventistas debemos estar sostenidos completamente de la mano de Dios y de su palabra pues como dijo Jesús en una ocasión, si lo amamos guardaremos sus mandamientos y tendremos la fe necesaria para creer en las doctrinas divinas.
El ateísmo es la perversión completa de la naturaleza humana, el pecado nos lleva al limite de negar la existencia de Dios.
El pastor menciono:
“El ateísmo resulta del estado de perversión moral y de su deseo de esconderse de Dios.”
Pues el ateísmo no es natural en nosotros, gracias al espíritu santo la naturaleza del hombre es buscar a un ser superior.

viernes, 19 de junio de 2009

EXAMENES DE LECCION DE ESCUELA SABATICA

PARA EL 27 DE JUNIO LA MISIONNombre y Apellidos………………….……………………………Grupo…….............Mencione el texto de Memoria……………………..…………..………………………1. El término misión se refiere a un aspecto no tan esencial de la vida cristiana. (V) (F).2. Las versiones castellanas suelen usar el sustantivo apóstol, que también viene de la palabra griega que significa uno enviado (V) (F).3. Los teólogos, a lo largo de los siglos, han debatido si Dios finalmente salvará a toda la gente o no. (V) (F).4. El mandato de llevar el evangelio al mundo entero se encuentra en los cinco evangelios, así como en el libro de los Hechos. (V) (F).5. Cuando el Nuevo Testamento habla acerca de “naciones”, usa una palabra que sería mejor traducirla como “grupos de personas”, o “grupos étnicos”. (V) (F).6. El pasaje en el que encontramos los mensajes de los tres ángeles se halla en un contexto que claramente enfoca el fin del tiempo, tiempos y medio tiempo. (V) (F).7. La iglesia no es principalmente una organización; más bien, son individuos que, sin ninguna excepción, son llamados a ser testigos. (V) (F).8. El énfasis en la importancia de una doctrina sana debe ser complementado con la decisión incondicional de anclar todo lo que decimos en Jesucristo. (V) (F).9. ¿Cuál es NUESTRA MISIÓN? (................................................................................)MISIONERO: WALTER GABRIELO.
LA COMUNIDAD Leccion12. 20 de Junio de 2009
Nombre y Apellidos………………….……………………………Grupo…….............
Mencione el texto de Memoria……………………..…………..………………………
1. La primera pareja debía complementarse mutuamente. Y debían multiplicarse y crear una comunidad de miembros de familia y, con el tiempo, unidades sociales mayores. (V) (F).
2. Una de las unidades sociales más importantes a la que la gente puede pertenecer es su iglesia. (V) (F).
3. La iglesia es una comunidad de creyentes que comparten la experiencia mínima de la salvación y reconocen a Cristo como su Señor. (V) (F).
4. En Génesis 16 encontramos el registro de un experimento en la edificación de una comunidad que no recibió la aprobación de Dios. (V) (F).
5. Laurence J. Peter, en cierta ocasión declaro: pertenecer a la iglesia de Cristo es más que tener el nombre anotado en los registros de la iglesia. (V) (F).
6. Cada miembro de la iglesia tiene un lugar especial y una contribución no tan específica para hacer. (V) (F).
7. Estar unidos a Cristo significa estar unidos a la verdad. Cristo se definió como la Verdad. (V) (F).
8. la verdadera unidad requiere un compromiso común con las Escrituras como la Palabra de Dios y con sus enseñanzas fundamentales (V) (F).
9. ¿Qué es la COMUNIDAD? (...............................................)
MISIONERO: WALTER GABRIELO.

lunes, 15 de junio de 2009

¿Es Lc.16 (El rico y Lázaro) una parábola o una historia verdadera?

Antes de responder esta pregunta es indispensable establecer qué es una parábola. Parábola es una historia de sucesos terrenales que se añade al relato para explicar cosas espirituales, nunca se insertan nombres propios porque exponen situaciones generales, por ejemplo: la parábola del sembrador, el hijo pródigo, el buen samaritano, el siervo infiel, el fariseo y el publicano, etc.
El relato de Lucas 16 vemos que no se ajusta a la definición técnica de lo que es una parábola, primeramente porque no se está refiriendo a un caso general sino a uno específico que incluye a un hombre en particular, Lázaro. Y en segundo lugar porque no se trata de un relato terrenal para entregar una enseñanza espiritual, sino que abarca el desenlace celestial más allá de esta vida terrenal.
Cuando se está narrando un suceso que no es terrenal, con personas definidas e identificadas por sus nombres propios, no se puede considerar como parábola, sino que corresponde a un acontecimiento histórico.
El Señor Jesucristo utilizó este método de enseñanza para transmitir masivamente sus enseñanzas a un pueblo que aunque era religioso, desconocía el verdadero significado espiritual de las ordenanzas e instrucciones que Dios les había entregado.
En esta descripción que hace el Señor Jesucristo en Lucas 16, corresponde a un acontecimiento que Él como Dios conoce y se permite descorrer el velo de la eternidad, para que nosotros estemos apercibidos y sin ninguna posibilidad a equivocarnos de lo que espera al ser humano después de la muerte.
Nos enseñó con grandes detalles que cuando morimos, en el instante mismo que nuestro cuerpo deja de funcionar, nuestra alma parte en plena consciencia a uno de esos dos lugares que se encuentran en la eternidad, el cielo o el lugar de tormento.
El Señor relata que ese rico que vivió en opulencia y las fiestas que su fortuna le permitía, cuando murió su cuerpo fue sepultado, pero inmediatamente cuando falleció, su alma partió en pleno estado de consciencia a ese lugar de tormento que su indiferencia y desenfreno lo arrojó. Allí también se le dijo que era imposible pasar de ese estado de condenación, al lugar donde llegó Lázaro y estaba Abraham.
Algunos piensan que este relato podría ser una parábola, pero lo cierto es que el Señor entregó sus enseñanzas a través de parábolas para revelarnos cosas celestiales, por lo tanto en nada quita la fuerza y solemnidad de esta indicación divina de lo que nos espera después de la muerte, porque este fue el propósito por el cual Cristo nos relató este episodio celestial.
No tiene gran importancia que Lucas 16 sea considerado un hecho verídico que sucedió con personas reales o una parábola, porque la enseñanza es la misma, y eso es lo que finalmente interesa en esta enseñanza del Señor Jesucristo cual Dios manifestado en carne.

viernes, 12 de junio de 2009

ESCUCHASTE ESTE TEMA DEL "HUMO" de Apocalipsis 14: 11

¿Qué quiere decir Apocalipsis 14: 11 cuando se refiere al humo que asciende "por los siglos de los siglos"? En Apocalipsis 14: 10, 11 se nos dice que la gente que recibe la marca de la bestia será "atormentada con fuego y azufre", y que "la humareda de su tormento se eleva por los siglos de los siglos; no tienen reposo, ni de día ni de noche".

La descripción de la "humareda" que se eleva "por los siglos de los siglos" es, como gran parte del Apocalipsis, una adaptación del Antiguo Testamento. Proviene de Isaías 34: 8-10, que dice que en el día de la venganza de Dios la tierra de
Edom se convertiría en torrentes de pez [asfalto fundido] y su suelo en azufre. "Ni de noche ni de día se apagará, por siempre [por los siglos de los siglos, en hebreo] subirá el huo de ella".
Tome nota a continuación que el pasaje de Isaías prosigue en los versículos 11 al17 hablándonos ¡acerca de las aves y los animales salvajes que iban a habitar la tierra de Edom! Estos no pueden vivir en medio del humo y del azufre. Y el capítulo 35 prosigue sin solución de continuidad para prometer una completa renovación.


De manera que este pasaje del Apocalipsis proveniente del dramático lenguaje del asfalto fundido, del azufre y del fuego que arde de día y de noche, y del humo que asciende por los siglos de los siglos, nos está describiendo en realidad una situación transitoria.
¿Cómo puede ser esto así?¿"Para siempre" no significa, entonces, eternamente? No debemos olvidar las expresiones idiomáticas y las metáforas, esas coloridas expresiones que no se pueden traducir literalmente. iQué podrían haber hecho los antiguos griegos o hebreos con expresiones nuestras como "a pie juntillas", "a ojos vistas" y otras semejantes? En Exodo 21: 6 se nos dice que en ciertas circunstancias un esclavo debía servir a su amo "para siempre". Esto es una traducción literal del hebreo, pero evidentemente es imposible. Algunas versiones modernas traducen esa expresión adecuadamente "por el resto de su vida". En este caso "para siempre" es una expresión idiomática hebrea que significa "por tanto tiempo como la persona viva".


Cuando las Escrituras nos dicen que Dios vive para siempre jamás, significa eternamente, porque Dios es inmortal y no puede morir. (Véase 1 Timoteo 1: 17; 6: 16.) Pero cuando nos dice que el humo de los impíos asciende por los siglos de los siglos significa que subirá mientras éstos vivan, lo que no va a ser mucho tiempo, si tomamos en cuenta el calor
que se producirá.


Las Escrituras a veces hablan de "fuego eterno". En 2 S. Pedro 2: 6 y en S. judas 7 Sodoma y Gomorra, las ciudades que fueron reducidas a "cenizas" en la época de Abrahán (alrededor del año 2000 AC), aparecen como "ejemplos" del "fuego eterno". Los arqueólogos no han podido ubicar sus ruinas. Yo mismo he estado junto al Mar Muerto y no he visto ascender humo por ninguna parte. El "fuego eterno" fue eterno en sus efectos. Esas ciudades fueron destruidas para
siempre.


La expresión similar, "fuego que no se apaga", que aparece en S. Mateo 3: 12, debería ser entendida por lo que dice. Un fuego que no se puede apagar es sencillamente una llama que nadie puede extinguir hasta que se termina de agotar por sí sola. De vez en cuando oímos hablar de ciertos incendios que los bomberos no pueden apagar. Son "inextinguibles", pero finalmente se agotan solos. Una bomba atómica es un fuego inextinguible.
En Malaquías 4: 1-3 se nos dice: "Pues aquí viene el día, abrasador como un horno, todos los arrogantes y los que cometen iniquidad serán como paja; y los consumirá el día que viene, dice Yahvéh Sebaot, hasta no dejarles raíz ni rama. . . Serán ellos ceniza bajo la planta de vuestros pies, el día en que yo actúe dice Yah- véh Sebaot".


Los profetas comprendían las expresiones idiomáticas y las metáforas de su propio idioma. No creían que los pecadores arderían durante "millones de años", que es lo que nosotros entendemos por "para siempre". Tampoco creía Jesús semejante cosa. Su brillante relato acerca del rico y Lázaro (S. Lucas 16: 19-31) debe ser considerada una parodia de una superstición muy popular, pero sin fundamentos. ¿En qué medida podía refrescar la lengua una gota de agua en medio de las llamas del infierno? Dios tiene cuidado de nosotros. Ama a la gente.


Aborrece el pecado no por ser cruel sino porque es Amor, y el amor es lo opuesto al egoísmo. Eliminará finalmente a los pecadores recalcitrantes para extirpar el pecado persistente, pero El
seguirá siendo Amor. Sencillamente no podría ver a sus criaturas torturadas en llamas "eternas", en el sentido en que nosotros usamos ese término. ¡Gracias a Dios porque sabemos que es una antigua expresión idiomática que no quiere decir realmente lo que parece!

EL DILUVIO EXISTIO COMO SE PUEDE COMPROVAR

Antes de entrar en el tema, diremos que con frecuencia, en el campo de las ciencias naturales, algunas teorías sostenidas por una generación de investigadores se convierten en la generación siguiente de enseñanzas que se presentan dogmáticamente como si fueran realidades. Sin embargo, fueron simplemente "teorías".
En algunas ciencias naturales (química, física, algún capítulo de la biología, bacteriología por ejemplo) esas teorías han sido de corta duración, a menos que hubieran sido bien comprobadas.
Por desgracia, en la geología durante muchísimo tiempo (décadas y más décadas), sin tener una base que las compruebe de una manera fidedigna, muchas teorías han subsistido como si fueran realidades.
Como ejemplo, mencionaremos la enseñanza de que el interior de la tierra está en estado de fusión, la de la uniformidad de la acción de los agentes telúricos (por ejemplo, la erosión) y la que sostiene que las formas de vida se han ido desarrollando mediante un lento proceso de evolución por todo el mundo. Sin una comprobación adecuada, estas suposiciones y las derivaciones que de ellas se desprenden dominaron en el panorama de las publicaciones científicas. Si hay algún fenómeno histórico que pueda compararse con éste, es el de la Edad Media, cuando los maestros de la época se guiaban por las enseñanzas de los escolásticos, sin someterlas a prueba. Es cierto que, desde hace medio siglo, han caído en descrédito las teorías de que el interior de la tierra está en estado de fusión y la uniformista.
Desde hace unos 50 años, las teorías geológicas se han inclinado más bien hacia un cierto tipo de "catastrofismo cíclico". Se ha venido aceptando que se alternaron períodos de una acción pareja de los agentes telúricos con otros de una acción muy pronunciada de esos mismos agentes (erosión provocada por glaciares, ríos, viento). La evolución de las especies animales y vegetales, aunque sólo es una suposición, sigue siendo aceptada por muchos.

La cuestión de los fósiles
Cuando se examinan las capas de rocas, es frecuente encontrar dos series de ellas que concuerdan perfectamente pero son muy diferentes en los fósiles que contienen. Según la teoría popular, una o más "edades geológicas" debieron pasar desde que fue depositada la primera serie de capas hasta que se asentó sobre ella la segunda. Sin embargo, en muchos casos, la creta de unas capas puede ir seguida de creta exactamente similar en la otra, o un esquisto puede ser sucedido por otro igual, siendo las dos series de capas exactamente las mismas en lo que atañe a sus estructuras y formaciones de rocas. Este ejemplo demuestra que las edades atribuidas a los fósiles presentan problemas capaces de echar por tierra todas las suposiciones que se han hecho en cuanto al transcurso de muchos miles de años a partir de esos animales que ahora están fosilizados.

Un evidente cambio de clima
Las rocas proporcionan pruebas irrefutables de que hubo una vez un cambio repentino y de carácter permanente en el clima de una buena parte de la tierra.
Sir Henry Howerth afirmó hace ya varias décadas que la flora y la fauna son virtualmente el único termómetro con que podemos comprobar el clima de los períodos pasados. "Las otras pruebas -afirma ese geólogo- siempre corren el riesgo de desvirtuarse por el hecho de que se podría atribuir al clima lo que en realidad se debe a otras causas. Los cantos rodados pueden ser arrollados por el mar tanto como por corrientes subgaciales y los conglomerados pueden ser formados por otros agentes que no sea el hielo. Pero las pruebas biológicas son indudables. Los reptiles de sangre fría no pueden vivir en agua helada; las plantas semitropicales, o las de las zonas templadas, no pueden producir semillas y no pueden sembrarlas en condiciones de un frío ártico" (The Glacial Nightmare [La pesadilla glacial], pág. 427).
Sin embargo, cuando se examina toda la serie geológica, desde el llamado período cámbrico hasta el pleistoceno, se encuentra que todos los fósiles demuestran con su aspecto que el mundo de antaño de los fósiles conoció un solo clima tal como lo indican las plantas y los animales sepultados en las rocas. Ese clima era a manera de un manto de suavidad primaveral y parecía abarcar en forma pareja todo el globo terráqueo. No podemos saber hoy exactamente cómo se mantenía ese clima uniforme, pero el hecho es que existía.

Desaparecieron misteriosamente los animales
Desde hace ya más de medio siglo se ha comprobado que los animales, por lo menos muchos de ellos, "fueron raídos de la existencia". Esta desaparición abarcó géneros, familias y hasta órdenes que incluyeron "algunos de los animales más notables que hayan adornado la tierra, elefantes, mastodontes, tapires, muchas especies de bisontes, caballos, felinos enormes y lobos gigantescos" (Oliverio P. Hay en su Monografía sobre los Pleistocenos de Norteamérica, edición de 1923).
Esta referencia comprueba lo que ya hemos dicho. Desde hace ya algo más de medio siglo, algunos geólogos y biólogos pudieron comprobar la extinción completa o la migración a latitudes más cálidas de animales como los grandes megaterios o perezosos terrestres, los gliptodontes, tres o cuatro géneros de camellos, tres o cuatro de tapires, una variedad de rinocerontes y varios animales más pequeños. Todos ellos se extinguieron, o por lo menos desaparecieron localmente, de una manera repentina y misteriosa. Sus restos son encontrados sepultados en capas de arcilla, arena o pedregullo que fueron depositados por agua en movimiento con pruebas inequívocas de que fue agua marina. ¿Cómo se realizó ese fenómeno?
El Dr. Howerth escribió en cuanto a este problema:
"Hace ya mucho tiempo, cuando era muchacho, mantuve correspondencia con Darwin acerca de un tema que siempre me había interesado: cómo explicar la existencia de los cuerpos de mamutes y otros animales conservados íntegros en el terreno helado de Siberia, la de enormes hecatombes demostradas por los esqueletos y los huesos de sus contemporáneos [de los mamutes] en diferentes partes del mundo, y el evidente gran salto que hay entre los restos de estos animales, incluso el hombre primitivo, y los restos de seres humanos posteriores con sus animales domesticados.
"Darwin, al igual que muchos otros que han hecho frente al problema, me confesó que eso era todavía para él un inmenso misterio de la geología y no le había hallado ninguna explicación racional".

¿Cuál fue la causa de los cambios?
Hay regiones ahora gélidas que evidentemente una vez tuvieron un clima templado. Tal es el caso de Siberia. Los cadáveres de mamutes allí encontrados lo demuestran y son una evidencia de un súbito y violento cambio de clima. Este hecho y otras comprobaciones (rocas coralinas sepultadas junto con abundante vegetación en regiones árticas, etc.) nos dicen que en nuestro planeta una vez existió una temperatura idea y pareja en todas las latitudes. ¿Qué cataclismo interrumpió bruscamente ese estado de cosas?
Los depósitos geológicos actuales indican una acción anormal de las mareas. Esa acción anormal se explica fácilmente cuando se toma en cuenta un cataclismo de orden mundial provocado por el agua. Recuérdese que las mareas significan cada 24h cuatro movimientos de agua: dos de flujo y otros dos de reflujo. La invasión repentina de grandes masas de agua que ocuparon vastas zonas de la tierra durante varios meses explica los efectos de mareas anormales que ocurrieron en regiones de la tierra donde hoy no tienen ningún efecto.
Con todo esto vamos llegando a una explicación racional de todos los principales fenómenos geológicos. Es muy clara la evidencia de que una vez se produjo un gran cataclismo de agua que destruyó el clima ideal que antes imperaba y al mismo tiempo sepultó en sus depósitos los animales que hoy, fosilizados, dejan a veces perplejos a los científicos. Recuérdese también que se encuentran restos humanos juntamente con los de mamutes e hipopótamos y otros animales gigantescos encontrados en el hemisferio norte. De eso se deduce que ese gran cambio mundial ocurrió después de que el hombre apareció en la tierra.
Es inevitable que relacionemos ese cataclismo, tan bien testificado por numerosos hechos perfectamente comprobados, con el diluvio que se describe en los capítulos séptimo y octavo del libro del Génesis. Existe una analogía sorprendente entre el relato que nos ha llegado del primer libro de la Biblia, y el que ha quedado registrado en las rocas. Los descubrimientos modernos y las conclusiones a que llegan algunos geólogos que no están atados por prejuicios confirman el relato bíblico que describe un diluvio universal.

jueves, 11 de junio de 2009

LA MARCA DE LA BESTIA 666

La bestia con los dos cuernos (EEUU) «hacía que a todos les pusiese una marca en la mano derecha, o en la frente; y que ninguno pudiese comprar ni vender, sino el que tuviese la marca o el nombre de la bestia, o el número de su nombre» (Apoc. 13: 16-17). «El que tiene entendimiento, cuente el número de la bestia, pues es número de hombre. Y su número es 666» (Apoc. 13: 18).El hombre que está en la jerarquía papal (anti-cristiana), no es ningún otro que el papa.


Su título oficial es “VICARIUS FILII DEI” que significa: Representante del Hijo de Dios (Our Sunday Visitor, 18.4.1915). En latín algunas letras tiene valor numérico. El correspondiente valor numérico de este título oficial, al sumarlo, muestra el número de la bestia que es 666.



Mientras que un grupo de personas aceptará la marca de la bestia y adorará la imagen de la bestia, otro grupo es descrito: «Aquí están los que guardan los mandamientos de Dios y tienen la fe de Jesús» (Apoc. 14: 12). Consecuentemente, la diferencia entre la verdadera y la falsa adoración tiene que ver con la observancia de los mandamientos de Dios. A un lado está el sello de Dios, significando el sábado del cuarto mandamiento. Al otro lado está la marca de la bestia, llamada la santidad del domingo.



El papado lo considera como su marca de autoridad porque en el año 364 d.C. Ella cambió el sábado al domingo (Catecismo P. Geiermann).El último control de la humanidad en lo religioso, político y económico, ya ha sido planeado por años por el Consejo Mundial de las iglesia, en cooperación con los gobiernos líderes del mundo y las Naciones Unidas en Nueva York.



La meta de este Nuevo Orden Mundial es el de crear una Religión Mundial común, no bíblica, para todas las personas, y establecer un Gobierno Mundial. El movimiento ecuménico, las muchas visitas del papa a representantes de gobiernos, como también los esfuerzos generales a nivel mundial para la globalización, confirman el plan.

LA IGLESIA Y SUS CRÍTICOS

LA IGLESIA Y SUS CRÍTICOS

Vivimos en los días finales de la historia humana, y Satanás está “con gran furor”, pues sabe que le queda poco tiempo (Apoc. 12:12). En su pelea final contra el pueblo remanente que guarda “los mandamientos de Dios” y tienen “el testimonio de Jesús” (Apoc. 12:17), el enemigo se vale de instrumentos humanos dentro del propio pueblo de Dios como sus más eficaces agentes (ver Mat. 13:24-30). Pretendiendo ser parte del pueblo de Dios y demostrando un celo superior para con la verdad, esos agentes consiguen gran éxito en infiltrar dentro de su propia iglesia el mismo espíritu belicoso que siempre caracterizo al “acusador de nuestros hermanos” (Apoc. 12:10).
Al mismo tiempo que Cristo nos amonesta a no juzgar las motivaciones interiores de las personas (Mat. 7:1), Él también nos estimula a evaluar las características personales de los profesos portavoces de la verdad, a fin de no ser engañados por ellos (Mat. 7:15-23). Elena de White en su libro La iglesia remanente, pp. 21-31, nos advierte contra los acusadores de la iglesia. Creo, por lo tanto, sería oportuno considerar más detenidamente el perfil de los críticos y sus estrategias, para no ser engañados por ellos y para evitar que nuestras congregaciones sean divididas por ellos.

Perfil de los críticos

Existen algunos críticos de la iglesia que llevan, por lo menos aparentemente, una vida normal y sin mayores problemas personales. Sería inadmisible, por lo tanto, atribuir el mismo perfil a todos los críticos. Pero muchos de ellos, que conocí personalmente o a través de informaciones biográficas obtenidas de otras personas, revelan por lo menos algunas de las siguientes características:
1. Desequilibrio emocional. Muchos críticos de la iglesia parecen afectados en mayor o menor grado por el así llamado Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC). El comportamiento de ellos se caracteriza por un fuerte impulso obsesivo-compulsivo a la agresividad para con todos los que están en desacuerdo con ellos. Todos los que se le oponen son considerados enemigos para ser combatidos en nombre de Dios.
2. Frustraciones personales. Gran parte de los críticos son personas frustradas por no haber conseguido determinado cargo de liderazgo o cierto reconocimiento público, o aún por haber sido destituidos de una función destacada socialmente. No consiguiendo convivir con el “luto” por la pérdida, ellas acaban proyectando sobre otros su amargura personal.
3. Problemas morales y familiares. Algunos de los críticos más agresivos son personas emocionalmente desestructuradas por problemas morales o traumadas por la perdida del cónyuge, por su muerte o separación. Sin la estabilidad de una familia bien estructurada, la persona tiende a ejercer una influencia desestabilizadora sobre otros segmentos sociales, incluyendo la propia iglesia.
4. Dificultades financieras. Algunos de los críticos más amargados son personas que tuvieron estabilidad económica, pero acabaron desequilibrándose financieramente. En muchos casos la persona incurre en infidelidad en los diezmos y ofrendas. No son pocos los que llegan a desviar los fondos de la iglesia hacia sus intereses particulares alegando que hay corrupción en el uso de esos fondos por parte de la denominación.
5. Problemas de autoestima. Conozco personas que fueron maltratadas en la infancia o que acarrean alguna deficiencia física o emocional y que buscan incesantemente algo para superar su baja autoestima. No consiguiendo proyectarse positivamente en la comunidad ellas recurren a la crítica como una forma de superación. No siéndoles conseguida la oportunidad de predicar pasan a criticar a otros predicadores que usan el púlpito.
6. Egocentrismo. Prácticamente todos los críticos son personas egocéntricas, que se colocan así mismas y a sus ideas como un punto de referencia para la espiritualidad de los demás. Aquellos que concuerdan con ellos son tenidos como buenos cristianos; aquellos que están en desacuerdo son considerados como en estado de apostasía. Consideran sus propias ideas como las mejores, y sus juicios como los más acertados.
7. Individualismo e independencia. El egocentrismo de los críticos genera en ellos una postura individualista e independiente que termina por distanciarlos del pensamiento colectivo de la iglesia. Para ellos la libertad de pensamiento individual es mucho más importante que el consejo de los hermanos. Quien esta en desacuerdo con ellos es tenido generalmente como retrogrado o destituido del verdadero espíritu democrático.
8. Espíritu acusador. Los críticos normalmente no se contentan con discutir ideas y conceptos. Para conseguir su espacio, ellos necesitan acusar y rotular negativamente a otras personas influyentes. Con ese mecanismo de auto defensa ellos consiguen transferir sutilmente el foco de atención de sus propios problemas personales hacia los supuestos problemas de otros. En ese proceso recurren a falsedades, no siempre detectables por sus interlocutores.
9. Tendencia generalizadora. El ser humano ya posee una tendencia natural a la generalización, pero los críticos son maestros en esa área. El comportamiento indebido de un líder de la iglesia o de un pequeño grupo de lideres es atribuido como característico de toda la denominación. Consecuentemente los más de 13 millones de miembros de la iglesia alrededor del mundo son responsabilizados por el comportamiento de uno o más individuos (Ezeq. 18:20).
Las características anteriores son frecuentemente encontradas entre los críticos de la iglesia, y nos ayudan a entender mejor el perfil de ellos. Pero ellas por si solas no consiguen explicar como personas con tales características consiguen atraer para si un número significativo de discípulos. Por eso, es importante considerar también algunas estrategias que los críticos usan para diseminar sus ideas.

Estrategia de los críticos

Las estrategias usadas en el proceso de diseminación de las críticas pueden variar tanto como el propio perfil de los críticos, pero entre las más comunes se destacan las siguientes:
1. Demostración de profundo conocimiento de la Biblia y de los escritos de Elena G. de White. En una época en que gran parte de los miembros de la iglesia carece de un conocimiento más profundo de la Biblia y de los escritos de Elena de White, los críticos aparecen como poseedores exclusivos de ese conocimiento. Una vez reconocidos en la iglesia, ellos no se inhiben de enfatizar lo que les agrada en los escritos inspirados y simplemente descartar lo que no les interesa.
2. Manipulación psicosocial. Una de las formas más comunes de cautivar a los oyentes es a través de la técnica de recitar públicamente gran numero de textos bíblicos o citas de Elena de White, previamente memorizados. Recitando textos que nadie en el auditorio había memorizado, los críticos consiguen vender la idea de que ellos poseen un conocimiento superior a todos los demás, y que ese conocimiento debe ser aceptado como una nueva luz de origen divino.
3. Supuesta originalidad. Muchos críticos desconocen o tuercen las raíces históricas de sus ideas, para dar la impresión de que, finalmente, alguien honesto surgió para restaurar la verdad en su pureza bíblica y para revelar las falsedades de la denominación. De esta forma los oyentes menos esclarecidos no conseguirán identificar la pretendida “nueva luz” como no más que viejas distorsiones doctrinales con las cuales la iglesia ya tuvo que enfrentarse en el pasado.
4. Difamación del liderazgo de la iglesia. No consiguiendo la aprobación del liderazgo de la iglesia para sus teorías personales, los críticos pasan entonces a difamarlos en la tentativa de conseguir adeptos que confíen más en ellos que en los lideres de la denominación. El apóstol Pedro advirtió que en los últimos días surgirán personas atrevidas o arrogantes que menospreciarían “cualquier gobierno” y difamarían las “autoridades superiores” (2 Ped. 2:10)
5. Postura del “salvador de la patria”. Habiendo minado la confianza en el liderazgo de la iglesia, los críticos están en condiciones de ser reconocidos como los únicos poseedores de la verdad y los auténticos líderes del pueblo de Dios. De esta forma, ellos finalmente consiguen asumir una posición de liderazgo que jamás le sería confiada por la propia iglesia.
6. Síndrome de mártir. Cuando la iglesia decide aplicar la debida censura eclesiástica a esos críticos disidentes ellos acostumbran a hacerse las victimas del sistema eclesiástico, considerado por ellos algo tan intolerante como el que persiguió a Martín Lutero. Con esa comparación ellos consiguen más simpatizantes todavía, pues existe una tendencia natural de justicia en el ser humano, de defender instintivamente a las “víctimas” (los que están siendo censurados) y de juzgar a los “agresores” (los que aplican la censura).
7. Discurso autobiográfico. Una de las estrategias más usadas, consciente o inconscientemente, por los críticos es de proyectar sobre la iglesia y su liderazgo su propio perfil anticristiano y antiético. Por el principio del espejo ellos se ven reflejados en otros y pasan a acusarlos de aquello que ellos mismos son. Esto no pasa de una actitud de desesperación para consigo mismos que los lleva a proyectar sobre los otros sus propias frustraciones personales.
8. División en las iglesias. Por más atractivo y convincente que pueda parecer el discurso de alguien, permanecen las indagaciones: ¿Cuáles son los “frutos” de la obra de ese individuo (Mat. 7:20)? ¿Sus palabras fortalecen la fe, el amor y la unidad de los creyentes (Juan 17:21)? Pero lamentablemente, la obra de esos críticos han dejado siempre detrás de si un fuerte espíritu de contienda y una gran sensación de superioridad personal, completamente antagónicos a la religión de Cristo (ver Mat. 5:43-48).
Otras estrategias pueden ser usadas por los críticos, pero las arriba mencionadas están entre las más comunes. Como miembros del cuerpo de Cristo, no podemos permitir que tales estrategias nos aparten de “la fe que una vez fue confiada a los santos” (Jud. 3).

Consideraciones adicionales

Muchos de esos críticos hasta pueden ser sinceros en sus alegatos, pero su obra de difamación no fortalece la fe ni promueve la unidad de la iglesia. Elena de White amonesta que tales personas jamás entrarán en el reino de Dios: “Vi que algunos se están marchitando espiritualmente. Han vivido durante algún tiempo velando para mantener a sus hermanos en el camino recto, observando todo defecto para crearles dificultades. Y mientras hacían esto, su mente no se aferraba a Dios ni al cielo ni a la verdad, sino precisamente donde Satanás quiere que se aferre: a alguna otra persona. Los tales han descuidado sus almas; rara vez advierten sus propios defectos, porque han tenido bastante que hacer para observar los defectos ajenos. Ni siquiera analizan sus propias almas ni escudriñan su propio corazón. Les llama la atención el vestido de una persona, su sombrero o su delantal. Deben hablar a éste o aquél, y esto basta para ocuparlos durante semanas. Vi que toda la religión de algunas pobres almas consiste en observar las vestiduras y las acciones de los demás, y censurarlas. A menos que se reformen no habrá lugar para ellas en el cielo, porque hasta criticarían al Señor mismo.” – Elena G. de White, Joyas de los Testimonios, tomo 1, p. 44 y 45.
La iglesia siempre se enfrentó con críticos belicosos a lo largo de su historia, y el número de esos críticos se intensificará aún más a medida que nos aproximamos al fin. Pero para la iglesia permanece la gloriosa promesa de Isaías 54:17: “Toda arma forjada contra ti no prevalecerá; y tu condenarás toda lengua que se levante contra ti. Esta es la herencia de los siervos del Señor y la victoria proviene de mi, afirma el Señor.”

Fuente: Artículo publicado en la Revista Adventista (Brasil), abril del 2005, pp. 16 y 17. Traducido por Ramona Viera.

LA EDAD DE LA TIERRA A LA LUZ DE LAS EVIDENCIAS EN LAS SAGRADAS ESCRITURAS,


LA EDAD DE LA TIERRA A LA LUZ DE LAS EVIDENCIAS EN LAS SAGRADAS ESCRITURAS,
LA ARQUEOLOGIA, LA HISTORIA Y LOS ESCRITOS DE ELENA G. DE WHITE
Introducción
¿Cómo congeniar las declaraciones del espíritu de profecía con respecto a los 6,000 años que tendría la tierra desde la Creación con las evidencias que encontramos en el texto bíblico, la arqueología, la historia y la geología?

Elena G. de White y la edad de la Tierra

Desde la Creación hasta sus días
Se conocen 30 declaraciones en los escritos de E. G. White (en inglés) que proponen un lapso de alrededor de 6,000 años de la edad de la tierra. Van desde 1864 hasta 1911.
1. “alrededor de seis mil años”. Total: 3 veces.
2. “cercana a los seis mil años”. Total: 1 vez.
3. “por cerca de seis mil años. Total: 6 veces.
4. “por seis mil años”. Total: 16 veces.
5. “seis mil años”. Total: 2 veces.
6. “por casi seis mil años”. Total: 1 vez.
7. “por más de seis mil años”. Total: 2 veces.

Entre la Creación y Jesús
Se registran 18 declaraciones, que abarcan desde 1874 hasta 1902, con dos tipos de expresiones:
1. “cuatro mil años”…. (“después de Adán”… “desde el Edén”). Total: 5 veces.
2. “por cuatro mil años”. Total: 11 veces.
3. “por más de cuatro mil años”. Total: 2 veces.

Entre la Creación y Moisés
Existe una declaración que señala: “durante los primeros 25 siglos de historia humana no hubo revelación escrita” (GC, viii, introducción).

Sumario
Elena G. de White escribió a través de su vida con el esquema que la edad de la tierra redondeaba los 6,000 años.
En ningún momento varió esta postura.
También es evidente que ella no pretendió poner una fecha exacta para la Creación.

¿SI LA BIBLIA ES TODO-SUFICIENTE, POR QUÉ NECESITAMOS LAS ESCRITURAS DE ELLEN WHITE?

LAS ESCRITURAS DE ELENA DE WHITE
¿Si la Biblia es todo-suficiente, por qué necesitamos las escrituras de Ellen White?
El Séptimo día Adventists no coloca las escrituras de Ellen White sobre el mismo nivel que la Escritura. " Los Escrituras Sagrada autónomos, el estándar único en el cual ella y todas otras escrituras debe ser juzgado y a que ellos deben ser sustanciales " (Seventh-day Adventists Creen ..., p. 227). Otro modo de enmarcar esta pregunta es de preguntar por qué la iglesia debería necesitar cualquiera de los regalos prometidos del Espíritu Santo. Ellen White contestó esta pregunta en la Introducción a su libro la Gran Controversia Entre Cristo y Satán:

" En Su palabra, Dios ha cometido a hombres el conocimiento necesario para la salvación. Los Escrituras Sagrada deben ser aceptados como una revelación autoritaria, infalible de Su voluntad. Ellos son el estándar de carácter, el revealer de doctrinas, y la prueba de experiencia. " Cada escritura inspirada de Dios es también provechosa para la enseñanza, para la reprobación, para la corrección, para la instrucción que está en la honradez; que el hombre de Dios pueda ser completo, proporcionado(amueblado) completamente a cada trabajo bueno " (2 Timothy 3:16, 17, R.V.).

" Aún el hecho que Dios ha revelado Su voluntad a hombres por Su Palabra, no ha dado innecesario la presencia continuada y la dirección del Espíritu Santo. Al contrario, nuestro Salvador prometió al Espíritu, abrir la Palabra a Sus criados, iluminar y aplicar sus enseñanzas. Y ya que esto era el Espíritu de Dios que inspiró la Biblia, es imposible que la enseñanza del Espíritu alguna vez debería estar contrariamente a él de la Palabra.

" No dieron al Espíritu - tampoco alguna vez puede ser concedido - para reemplazar la Biblia; para las Escrituras explícitamente declaran que la Palabra de Dios es el estándar en el cual toda la enseñanza y la experiencia deben ser probadas....
" En la armonía con la Palabra de Dios, Su Espíritu debía seguir su trabajo a lo largo del período de la dispensación de evangelio. Durante los años mientras daban a las Escrituras tanto de los Viejos como del Nuevo Testamento, el Espíritu Santo no dejó de comunicar la luz a mentes individuales, aparte de las revelaciones para ser incorporadas en la Canon Sagrada. La Biblia sí mismo se relaciona como, por el Espíritu Santo, los hombres no recibieron la advertencia, la reprobación, el consejo, y la instrucción, en asuntos de ninguna manera que relacionan con el dar de las Escrituras. Y la mención es hecha de profetas en años diferentes, de cuyas expresiones nada es registrado. En la manera parecida, después del final de la Canon de la Escritura, el Espíritu Santo debía todavía seguir su trabajo, ilustrar, advertir, y consolar a los niños de Dios " (la Gran Controversia, pp. vii, viii).

¿HOMOSEXUALIDAD?

¿Condena la Biblia la homosexualidad?
RESPUESTA
Si Dios no repudiara y condenara la homosexualidad, no habría mandado un juicio tan severo contra Sodoma. No olvidemos que desde allí proviene la palabra "sodomita".
La Biblia no condena solamente la homosexualidad, sino que inclusive a los afeminados. En 1Cor.6: 9 entrega una lista de aquellos que no entrarán en el reino de los cielos e incluye a estos individuos: "ni los afeminados, ni los que se echan con varones".
El pasaje de Rm.1: 22-28 la relaciona con la idolatría. En otros la vincula con el consumo de drogas y las prácticas ocultistas y esotéricas. Pareciera que todos esos pecados horrendos que Dios condena, son además una puerta que conduce por las cloacas inmundas que derivan en la homosexualidad.
Dice Dios en Rm. 1: 22-27 "Profesando ser sabios, se hicieron necios, y cambiaron la gloria del Dios incorruptible en semejanza de imagen de hombre corruptible (Is.44:13 "lo hace en forma de varón, a semejanza de hombre hermoso, para tenerlo en casa"), de aves, de cuadrúpedos y de reptiles (especies muy veneradas por los brujos). Por lo cual también Dios los entregó a la inmundicia, en las concupiscencias de sus corazones, de modo que deshonraron entre sí sus propios cuerpos, ya que cambiaron la verdad de Dios por la mentira, honrando y dando culto a las criaturas antes que al Creador, el cual es bendito por los siglos. Amén. Por esto Dios los entregó a pasiones vergonzosas; pues aun sus mujeres cambiaron el uso natural por el que es contra naturaleza, y de igual modo también los hombres, dejando el uso natural de la mujer, se encendieron en su lascivia unos con otros, cometiendo hechos vergonzosos hombres con hombres, y recibiendo en sí mismos la retribución debida a su extravío".
A todos aquellos que no aprobaron tener en cuenta a Dios, los entregó a una mente reprobada, para hacer cosas que no convienen. Aquí se cumple los frutos que puede producir la idolatría y el rechazar la Palabra de Dios, por lo tanto resulta muy evidente los desvaríos contra naturaleza que han sufrido aquellos que quemaron la Biblia durante siglos, han cultivado y fomentado la idolatría y han prohibido casarse al clero, aun considerando que Dios ordena que los obispos sean casados, tengan hijos y que gobiernen bien su casa.
Entre los requisitos que Dios establece para los obispos y pastores dice: Tito 1:6 "marido de una sola mujer, y tenga hijos creyentes". 1Tm.3: 4-5 "que gobierne bien su casa, que tenga a sus hijos en sujeción con toda honestidad (pues el que no sabe gobernar bien su casa, ¿cómo cuidará de la iglesia de Dios?".
Y en el capítulo siguiente, es decir, dentro de este mismo contexto advierte: 1Tm.4: 1-3 "Pero el Espíritu dice claramente que en los postreros tiempos algunos apostarán de la fe, escuchando a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios; por la hipocresía de mentirosos que, teniendo cauterizada la conciencia, prohibirán casarse, y mandarán abstenerse de alimentos que Dios creó para que con acción de gracias participaran de ellos los creyentes".
Para entender bien esta prohibición de casarse que le imponen al clero, y las características de escuchar espíritus y doctrinas de demonios, debemos recordar que el apóstol Pedro era casado y también el resto de los apóstoles.
Mt. 8: 14 "Vino Jesús a casa de Pedro, y vio a la suegra de éste postrada en cama". Si tenía suegra, era obviamente porque tenía esposa.
1Cor.9: 5 "¿No tenemos derecho de traer con nosotros una hermana por mujer como también los otros apóstoles, y los hermanos del Señor, y Pedro?". Todos los apóstoles se acompañaban de sus propias esposas en sus viajes.
Incluso el apóstol Pablo era casado, porque de lo contrario no podría haber sido miembro del sanedrín, donde él perteneció y dio su voto (Hch.26:10). Allí era requisito indispensable que todos sus miembros fueran casados.
Pero sin embargo, para que se cumpliera lo que Dios había profetizado en 1Tm.4: 1-3, hay quienes han prohibido al clero casarse y han provisto sus monasterios durante siglos, como amparo de inmoralidades repugnantes y refugio para aquellos que practican esas depravaciones. Como leímos en Rm.1:27 "dejando el uso natural de la mujer, se encendieron en sí mismos en su lascivia unos con otros, cometiendo hechos vergonzosos hombres con hombres".
Hoy que tenemos una sociedad tan "liberal" y permisiva, ya no necesitan esconderse en esos lugares, así que los encontramos con mucho descaro por las calles y lugares públicos. Pero también esto mismo ha provocado una falta de postulantes que ha provocado una seria crisis en ese clero; sin contar con las innumerables demandas judiciales que en varios países le han impuesto por los casos de pedofilia que han llegado hasta los tribunales, que obligaron al estado más rico del mundo, declararse "en quiebra" para eludir el pago de las compensaciones que le han establecido.
Si Dios no perdonó a Sodoma y Gomorra por este pecado, su Santidad y Justicia que son inmutables, tampoco van a tolerar indefinidamente a nuestra sociedad. Toda la inmundicia que hoy somos testigos, es una prueba contundente que la venida del Señor está muy cerca.
En Su Palabra nos advirtió, 2Tm.3: 13 "mas los malos hombres, y los engañadores irán de mal en peor, engañando y siendo engañados". La oscuridad de este mundo irá en aumento, y solamente cuando alumbre el Sol de Justicia, volverá a brillar la luz en este mundo.

lunes, 8 de junio de 2009

EL BUEN SAMARITANO comentario exegetico

San Lucas 10:25-37
Según algunas exégesis antiquísimas, el hombre que descendía de Jerusalén a Jericó es Adán, la humanidad entera; Jerusalén es el paraíso; Jericó, el mundo; los ladrones son los demonios y las pasiones, que hacen caer al hombre en pecado provocándole la muerte; el sacerdote y el levita son la Ley y los profetas, que han visto la situación del hombre, pero no han podido hacer nada para cambiarla; el buen samaritano es Cristo, que ha derramado sobre las heridas humanas el vino de su sangre y el oleo o aceite del Espíritu Santo; la posada, a la que lleva al hombre recogido en el camino, es la Iglesia; el posadero es el pastor de la Iglesia, a la que confía el cuidado; el hecho de que el samaritano prometa volver, indica el anuncio de la segunda venida del Salvador Ahora, sabemos a quien debemos imitar, quien esta detrás del anónimo samaritano. Amar al prójimo, hacerse cercano a el, es exigido por el seguimiento de Cristo; es el primer deber de quien quiere ser su discípulo. La conclusión «Anda, haz tu lo mismo» nos recuerda lo que Jesús dijo a sus discípulos, después de haberles lavado los pies: «Os he dado ejemplo, para que también vosotros hagáis como yo he hecho con vosotros» (Juan 13,15). La parábola espera encarnarse, por lo tanto, en nuestra vida cotidiana. Escuchando el relato es fácil enojarse con el levita y con el sacerdote, que pasan sin pararse, y, tal vez, para tomar ocasión de acusar a la clase entera de los actuales levitas y los sacerdotes. Que las palabras de Jesús, en primer lugar, deben hacernos reflexionar a nosotros, el clero, esta fuera de duda. Pero, seria buscar pretextos limitarse a hacer esto. Cuantas personas «medio muertas» (en el cuerpo o en el espíritu) hemos encontrado, sacerdotes y laicos, en la vida y posiblemente también hemos caminado hacia adelante! La parábola del buen samaritano tiene en nuestros días un ámbito de aplicación totalmente nuevo. Los modernos bandidos, que dejan a las personas medio muertas por el camino, son los que nos ven necesitados y pasan de largo de muchas maneras: INDIFERENCIA Haz tú lo mismo! Jesús es el buen samaritano, es el hombre más próximo a todo hombre y a todos los hombres. La grandeza de la vocación cristiana está en que Jesús no nos dice: "ve y enseña tú lo mismo", sino "ve y haz tú lo mismo". Como nos dirá Santiago: "La fe sin obras es una fe muerta". Hoy cada cristiano es llamado a repetir a Jesús en su vida, a hacer del buen samaritano un propio seudónimo. Jesús dice a algunos cristianos: "Haz tú lo mismo en tu casa: con tu mamá que está enferma; con tu vecino, que es anciano y no puede valerse por sí mismo para muchas cosas; con tu hijo que tuvo un accidente y habrá de vivir el resto de su vida en silla de ruedas". A otros cristianos Jesús dirá: "Ve y haz tú lo mismo cuando vas por la calle, dando limosna con gusto a quien te la pida, informando amablemente a quien te pregunta por una dirección o por el nombre de un negocio; ve y haz tú lo mismo cuando vas en el autobús o en el metro, cediendo el asiento a los ancianos, a las madres con niños pequeños, a los minusválidos, siendo respetuoso y dueño de ti mismo cuando el autobús va a tope y te empujan por todas partes o incluso intentan robarte". Haz tú lo mismo: esta frase la deberíamos tener presente en nuestra mente y en nuestro corazón a lo largo de todos los días. Una frase que posee un potencial enorme de creatividad y de impulsos nuevos a la acción en favor de nuestros hermanos los hombres. Haz tú lo mismo: esta sola frase es capaz de inventar el futuro, de fraguar un mundo nuevo y mejor. ¿Cuántos cristianos haremos caso?

domingo, 7 de junio de 2009

UN LIBRITO EN SU MANO. APOCALIPSIS 10:2-4

Un librito en su mano:
Este “Ángel Fuerte”, que presenta el Apocalipsis, tenía en su mano un “librito”:
Apocalipsis 10: 2- 4“Y tenía en su mano un librito abierto: y puso su pie derecho sobre el mar, y el izquierdo sobre la tierra; y clamó con grande voz, como cuando un león ruge: y cuando hubo clamado, siete truenos hablaron sus voces. Y cuando los siete truenos hubieron hablado sus voces, yo iba á escribir, y oí una voz del cielo que me decía: Sella las cosas que los siete truenos han hablado, y no las escribas.”
Un librito abierto en su mano
¿Qué “librito” es este que tiene el Ángel en su mano? Las características que tenemos presentadas en los textos citados, como en los que veremos más adelante, nos mostraran la respuesta. Primeramente aquí en estos textos citados encontramos que el “Ángel Fuerte” al tomar el librito, hace manifiesto un clamor. Este clamor lo describe el profeta “como cuando un león ruge”.
¿Qué significa esto?
Oseas 11: 10“En pos de Jehová caminarán: él bramará como león: cual león rugirá él de cierto, y los hijos se moverán azorados del occidente.”
La comparación que la Sagrada Escritura hace es obvia. Se puede deducir claramente que el “rugir de león” está comparado con la voz de Dios:
¿Por medio de qué se hace manifiesta la voz de Dios?
Deuteronomio 4: 12 “Y habló Jehová con vosotros de en medio del fuego, oísteis la voz d e sus Palabras, pero a excepción de oír la voz ninguna figura visteis.”
Es claro que la voz de Dios esta dada a través de su Palabra. Ya que este clamor es dado por el ángel, y sabiendo que un ángel es un mensajero que ejecuta la Palabra de Jehová vendría a ser la predicación hecha por los mensajeros que obedecen su voluntad, ya que simbólicamente los ángeles representan a los portadores de la Palabra de Dios:
Salmos 103: 20“Bendecid á Jehová, vosotros sus ángeles, Poderosos en fortaleza, que ejecutáis su palabra, obedeciendo á la voz de su precepto.”
Una vez que es dado este “clamor”, este se halla poderosamente fortalecido por el sonido de “siete truenos”. ¿Qué son los truenos?
2 Samuel 22: 14“Jehová tronó desde los cielos, Y el Altísimo dio su voz.”
La Palabra de Dios en la escritura está simbolizada por el “trueno”; Si la Palabra de Dios está simbolizada por el “trueno”, entonces lo que el “Ángel Fuerte” clamaba, estaba fundamentado en esta “Palabra de Dios”, es decir estaba este “clamor” fortalecido y confirmado por ella.
Simbología:
Trueno = Palabra de Dios
Lo que podemos ver hasta aquí, es que este librito, no es otra cosa que la Palabra de Dios. Pero nuestra pregunta es, ¿qué parte de ella? Las características que veremos a continuación nos mostrarán exactamente que parte es. La última característica que se presenta en este texto es que este “clamor” abarcaba tanto la “tierra” como el “mar”.
De acuerdo con la Palabra de Dios, “aguas” y “tierra” son dos cosas opuestas:
Génesis 1: 9, 10“Y dijo Dios: ‘Júntense las aguas que están debajo de los cielos en un lugar, y descúbrase lo seco’: y fue así. Y llamó Dios á lo seco Tierra, y á la reunión de las aguas llamó Mares: y vio Dios que era bueno.”
Considerando esto, veamos que significan las “aguas”:
Apocalipsis 17: 15“Y él me dice: ‘Las aguas que has visto donde la ramera se sienta, son pueblos, muchedumbres, naciones y lenguas’.”
Simbología:
Aguas = Pueblos, muchedumbres, naciones y lenguas
De acuerdo con el texto, entonces las “aguas” representarían todos los lugares super poblados. La “tierra” ¿qué significará?:
Jeremías 17: 6“Pues será como la retama en el desierto, y no verá cuando viniere el bien; sino que morará en lugares secos en el desierto, en tierra despoblada y deshabitada.”
Simbología:
Tierra = Lugares deshabitados
En conformidad con este otro texto vemos que “tierra” significa lugares despoblados y deshabitados. Por tanto, el que un pie este sobre las “aguas” y el otro sobre la “tierra” significaría, que el “clamor” o predicación abarcaría toda la tierra, por la explicación de símbolos.

EL SANTUARIO CELESTIAL


EL SANTUARIO CELESTIAL
EL PASAJE que sobre todos los demás había sido el fundamento y la columna dé, la fe adventista, es esta declaración: "Hasta dos mil trescientas tardes y mañanas; luego el santuario será purificado" (Dan. 8:14). Esas habían sido palabras familiares para todos los creyentes en la pronta venida del Señor. Miles de labios repitieron gozosamente esta profecía como si fuera el santo y seña de su fe. Todos creían que de los acontecimientos predichos por ella dependían sus más brillantes expectativas y sus esperanzas más acariciadas. Se demostró ya que esos días proféticos terminaron en el otoño de 1844. En concordancia con el resto del mundo, cristiano, los adventistas sostenían entonces que la tierra -o al menos una porción de ella- era el santuario, y que la purificación del santuario era la de la tierra por medio de los fuegos del gran día final. Creían que eso ocurriría en ocasión de la segunda venida de Cristo. De allí la conclusión de que Jesús volvería a la tierra en 1844.
Pero el tiempo señalado llegó, y el Señor no apareció. Los creyentes sabían que la Palabra de Dios no podía fallar; su interpretación de la profecía debía estar equivocada; pero, ¿cuál era el error? Muchos cortaron temerariamente el nudo de la dificultad negando que los 2.300 días terminaran en 1844. Ninguna razón se podía dar para asumir esa 394 actitud, excepto que Cristo no había venido en el momento cuando se lo esperaba. Argumentaron que si los días proféticos hubieran terminado en 1844, Cristo habría venido para limpiar el santuario mediante la purificación de la tierra con fuego; y puesto que no había venido, los días no podía haber terminado.
Aunque la mayor parte de los adventistas abandonó sus antiguos cálculos de los períodos proféticos y por lo tanto negó la validez del movimiento que se basaba en ellos, unos pocos no estuvieron dispuestos a renunciar a puntos de fe y a una experiencia que tenían el apoyó de las Escrituras y del testimonio especial del Espíritu de Dios. Creían que habían adoptado sanos principios de interpretación en su estudio de las Escrituras, y que era su deber aferrarse firmemente a las verdades que ya habían obtenido, y continuar en el mismo plan de investigación bíblica. Con ferviente oración revisaron sus convicciones, y estudiaron las Escrituras para descubrir su error. Como no encontraron error alguno en su explicación de los períodos proféticos, se decidieron a examinar más cuidadosamente el tema del santuario.

El santuario terrenal y el celestial
Al investigar descubrieron que el santuario terrenal construido por Moisés por orden de Dios de acuerdo con el modelo que se le mostró en el Monte, era "símbolo para el tiempo presente, según el cual se presentan ofrendas y sacrificios"; que sus dos lugares santos eran "figuras de las cosas celestiales."; que Cristo, nuestro gran sumo sacerdote, es "ministro del santuario y de aquel verdadero tabernáculo que levantó el Señor, y no el hombre"; y que 395 "no entró Cristo en el Santuario hecho de mano, figura de verdadero, sino en el cielo mismo para presentarse ahora por nosotros ante Dios" (Heb. 9: 9, 23; 8: 2; 9: 24).
El santuario que está en el cielo, en el cual oficia Jesús en nuestro favor, es el gran original, del cual el santuario construido por Moisés era una copia. Así como el santuario terrenal tenía dos compartimentos, el lugar santo y el lugar santísimo, también hay dos lugares santos en el santuario celestial. Y el arca que contenía la ley, de Dios, el altar del incienso y otros instrumentos de servicio que encontramos en el santuario terrenal, tenían su contraparte en el santuario celestial. En santa visión se le permitió al apóstol Juan entrar en los cielos, y allí vio el candelabro y el altar del incienso, "y el templo de Dios fue abierto", y él vio "el arca de su pacto" (Apoc. 4: 5; 8: 3; 11: 19).

Los que estaban buscando la verdad encontraron pruebas irrefutables de la existencia de un santuario en el cielo. Moisés , hizo el santuario terrenal de acuerdo con el modelo que se le. mostró. Pablo declaró que ese modelo es el verdadero santuario que está en el cielo. (Heb. 8: 2, 5.) Juan da testimonio de que lo vio en el cielo.
Cuando terminaron los 2.300 días en 1844, por muchos siglos no había habido santuario en la tierra; por lo tanto, el santuario de los cielos es el que debe de haber sido mencionado en la declaración: "Hasta 2.300 tardes y mañanas; luego el santuario será purificado". Pero, ¿cómo podía necesitar purificación el santuario celestial? Al volver a las Escrituras, los estudiosos de la profecía descubrieron que esa purificación no se refería a impurezas materiales, puesto que se lo debía hacer con sangre, y por consiguiente debía de ser una purificación del pecado. 396
Así dice el apóstol: "Fue, pues, necesario que las figuras de las cosas celestiales fuesen purificadas así [con sangre de animales]; pero las cosas celestiales mismas, con mejores sacrificios que éstos [la misma preciosa sangre de Cristo]" (Heb. 9: 23).
Para saber más acerca de la purificación señalada por la profecía, era necesario comprender el ministerio que se lleva a cabo en el santuario celestial. Esto se podía lograr sólo estudiando el ministerio que se realizaba en el santuario terrenal, pues Pablo declara que los sacerdotes que oficiaban allí servían "a lo que es figura y sombra de las cosas celestiales" (Heb. 8: 5).

La purificación del santuario

Así como los pecados del pueblo eran transferidos antiguamente, en forma figurada, al santuario terrenal, por medio de la sangre de la ofrenda por el pecado, así nuestros pecados son, de hecho, transferidos al santuario celestial por medio de la sangre de Cristo. Y así como la purificación típica del santuario terrenal se llevaba a cabo mediante la remoción de los pecados que lo habían contaminado, así la limpieza real del santuario celestial se cumplirá mediante la remoción de los pecados que están registrados allí. Esto requiere un examen de los libros de registro para determinar quiénes, por medio del arrepentimiento del pecado y la fe en Cristo, están en condiciones de recibir los beneficios de su expiación. La purificación del santuario por lo tanto implica un juicio investigador. Esa obra debe realizarse antes de la venida de Cristo para redimir a su pueblo porque cuando él venga traerá su galardón con él "para recompensar a cada uno según sea su obra" (Apoc. 22: 12). 397
Así los que siguieron la luz de la palabra profética vieron que en vez de venir a la tierra al término de los 2.300 días en 1844, Cristo había entrado en el lugar santísimo del santuario celestial, a la presencia de Dios, para realizar la obra final de expiación, preparatoria para su venida.

EL MENSAJE DE LOS TRES ANGELES


Al final del 1er. Siglo de la era cristiana, Dios le mostró al apóstol Juan mientras se encontraba en la Isla de Patmos, el surgimiento de un movimiento religioso que impactaría a todas las naciones de la Tierra (Apocalipsis 1:1,9; 1 4:~1 2).
Bajo la figura de tres ángeles volando por en medio del cielo, Dios mostró que antes de la segunda venida de Cristo, Él levantaría un pueblo que predicaría la verdad de la Palabra de Dios en medio del error y la confusión religiosa de los últimos días (Apocalipsis 14:14-16).
Desde los días apostólicos, el enemigo de Dios ha estado tratando de desviar la atención de los cristianos del mensaje predicado por Cristo y los apóstoles. Antes de terminar el primer siglo de la era cristiana, ya se mencionaba la aparición de fábulas inventadas por los hombres (Gálatas 1:6-10; 2 Corintios 11:3,4). El apóstol Pedro predijo que "maestros falsos introducirían errores dentro del cristianismo y así el camino de la verdad sería distorsionado" (2 Pedro 2:1, 2). También le fue mostrado al apóstol Pablo que la iglesia cristiana fundada por Cristo caería en un estado de apostasía antes de la venida del Señor (Hechos 2O:28-3O: 1 Timoteo4:1; 2 Tesalonisenses 2:1-4). Debido a ese apartamiento de la verdad, el Señor levantaría sobre la tierra hombres que enseñarían el verdadero evangelio, el que está sostenido por la Biblia.
Como hemos visto, existe un sistema religioso denominado en la Biblia como “la bestia”, el cual "ha maravillado a toda la tierra en pos de ella" (Apocalipsis 13:3). Este “sistema” predica un mensaje falso, no enseña a adorar en forma correcta y domina con sus errores las mentes de la mayoría de los habitantes de la tierra.
El pueblo que Juan vio levantarse para predicar las buenas nuevas de salvación, debía ir a toda nación, tribu, lengua y pueblo, con un mensaje contrario al que predica la bestia, pero Àcuál es ese pueblo que predica este mensaje al mundo?
Temed a Dios y Dadle Gloria
El mundo en que vivimos ha perdido todo respeto a las cosas sagradas. Da culto a las criaturas en lugar de al Creador. Glorifica la ciencia. Se enorgullece de sus inventos, practica la idolatría y coloca las tradiciones de los hombres por encima de lo que Dios dice. El hombre de hoy no respeta El Nombre de Dios, ni Su día de culto, ni los principios de Su Palabra. El mensaje de los tres ángeles invita a la humanidad a cambiar de rumbo, a temer a Dios y honrarlo.
La Hora del Juicio ha llegado
Antes de Jesús volver a la tierra, se habrá decidido el caso de todos los que han de entrar al reino de Dios. El juicio de Dios se desarrolla en tres etapas, y actualmente, vivimos bajo la primera etapa que se llama el “juicio investigador” un juicio específico para aquellos que a través de la historia han estado ligados al pueblo de Dios
Las profecías de la Biblia indicaban el tíempo en el que se iniciaría este juicio. Pronto todos los casos estarán decididos ¿Deseas entrar al reino de Cristo?
Adorad al Creador Solamente
Es una pena que el mundo de hoy no sepa a quién adorar, cuándo adorar, cómo adorar. En gran parte del mundo se rinde tributo a Buda por parte de millones de personas. En otra gran parte del mundo se veneran los escritos de Mahoma. Un vasto sector del cristianismo no habla más que de María (aunque esta mujer fue una dama piadosa que esperaba la redención, ella misma necesitaba al Redentor del mundo). Sin embargo, ni a ella, ni a los “santos” ni a otros dioses inexistentes se les puede adorar. La Biblia dice: "Adora a Jehová tu Dios" (Apocalipsis 22:8, 9). En Apocalipsis 13:4 dice que la gente al seguir los errores de la bestia estaría adorando al dragón, es decir, a Satanás.
Cada persona adora según las enseñanzas que se le transmiten, pero Dios no acepta que le adoren en el error, sino en la verdad (Mateo 15:8,9; Juan 4:24). La frase "adorad al que hizo el cielo y la tierra, el mar y las fuentes de las aguas" hace alusión al cuarto mandamiento de la ley de Dios (Exodo 20:8-11). El mundo se ha olvidado del mandamiento que contiene el sello del Dios vivo, el cual le da a Dios titulo (Creador), nombre (Jehová) y territorio (cielo y tierra). En su lugar, el hombre ha instaurado el "Sun-day" (Domingo), el cual era utilizado por los paganos como día de adorar el sol. ¿Adorarás tú también en forma equivocada?
"Ha caído la Gran Babilonia"
En Apocalipsis 17:1-5 dice que esta Babilonia es una religión unida a los gobiernos de la tierra. Transmite un falso vino, una doctrina equivocada. Su silla, está en territorio de lo que fue el Imperio Romano. Es la religión que permite los adornos que Dios prohibe. Es la iglesia que levanta en cada servicio el cáliz de oro. Es la iglesia que tiene el título de “madre del cristianismo”. Es la iglesia que derramó la sangre de los hijos de Dios. ¿Estarás tú en ella? Lee Apocalipsis18:1-5 y verás lo que Dios te dice al respecto.
No Adoreis a la Bestia
¿A quién representa esa bestia? ¿Cómo sabrás si la estás adorando? ¿Qué sucederá si la adoras? ¿Sabías que al obedecer lo que la bestia dice, la estás adorando?
El tema de Apocaíipsis 14:6-12 es uno solo: ADORAR A DIOS O ADORAR A LA BESTIA. NO hay posición intermedia... ¿A quién adorarás tú?
La bestia está ligada a una iglesia corrupta en su doctrina. La imagen de la bestia representa a iglesias que pretenden ser diferentes a la iglesia ligada a la bestia, pero en su doctrina demuestran que son una réplica de ella, separados como organización, pero unidos en la mayoría de sus doctrinas. Es por ello que Apocalipsis 17:5: las llama “madre e hijas”. De modo que la imagen de la bestia representa a aquellas iglesias que dicen creer y practicar lo que dice la Biblia, pero en la realidad siguen los pasos de la ramera de Apocalipsis 17:1-5.
La Marca de la Bestia
Para entender lo que es la marca de la bestia tenemos que irnos a Daniel 7:1-25 y Apocalipsis 13:1-18. En estos dos capítulos encontramos quién es la bestia, encontramos que ese poder religioso aparece en Daniel 7:25 cambiando la ley de Dios. En Apocalipsis 13:1-8 aparece imponiendo un falso sistema de adoración. En el libro de Exodo, capítulo 20:1-17 se encuentran los diez mandamientos. Si estos mandamientos descritos en la Biblia, entregados a Moisés por Dios en el monte Sinaí, escritos por el propio dedo de Dios, se comparan con los que aparecen publicados en el “catecismo católico” se verá que dos de ellos fueron cambiados: el segundo mandamiento de los versos 4-6 y el cuarto mandamiento del 8-11. Precísamente, son estos dos mandamientos los que indican a quién adorar y en qué día adorarle. La “bestia” hizo el cambio predicho en Daniel 7:25 y aparece luego en Apocalipsis imponiendo una adoración falsa. Obviamente, una marca de identificación que está ligada al cambio que le hizo a la Ley de Dios.
“La ira de Dios”
Quienes sigan a la bestia recibirán la ira de Dios, que según Apocaíipsis 16, no es otra cosa que las siete postreras plagas. Por otro lado, quienes guarden los mandamientos verdaderos de Dios no recibirán estas plagas. Aquellos que tienen “la fe de Jesús” serán protegidos en ese día. Sólo los que se ligan a la bestia sufrirán el castigo de la ira de Dios.
El Lago de Fuego y Azufre
La Biblia dice en Apocalipsis 20:7-10 que ese lago de fuego se formará en la tierra mil años después de la venida del Señor. Dios hará descender fuego con el que destruirá a Satanás y a los ángeles caídos, a la bestia y a la imagen de la bestia y obviamente, a los que le siguen. !He aquí la importancia de saber quién que es la bestia, cuál es su imagen y cuál es su marca!
Los Mandamientos de Dios y la Fe de Jesús
A través de toda la Biblia podemos encontrar que toda verdadera religión ha sostenido estos dos principios como norma de fe y práctica. Hoy en día, existen muchos cristianos sinceros de corazón que creen en Jesús, pero no quieren guardar sus mandamientos. Se olvidan que Jesús dijo: "Si me amáis, guardad mis mandamientos" (Juan 14:15; 15:10). Sólo el pueblo “que guarda los mandamientos de Dios (Exodo 20) y tiene “la fe de Jesús” será librado de la ira que vendrá. Hay dos mandamientos que en forma específica nos conectan o desconectan de la bestia, de su imagen y de su marca, ellos se encuentran en Exodo 20:4-6 y 8-11:
“No te harás esculturas ni imagen alguna de lo que hay en lo alto de los cielos, ni de lo que hay abajo sobre la tierra, ni de lo que hay en las aguas debajo de la tierra. No te postrarás ante ellas, y no las servirás, porque yo soy Yavé tu Dios, un Dios celoso, que castiga en los hijos las iniquidades de los padres hasta la tercera y cuarta generación de los que me odian, y hago misericordia hasta mil generaciones de los que me aman y guardan mis mandamientos.”
“Acuérdate del día del sábado para santificarlo. Seis días trabajarás y harás tus obras, pero el séptimo día es día de descanso, consagrado a Yavé, tu Dios, y no harás en él trabajo alguno, ni tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu siervo, ni tu sierva, ni tu ganado, ni el extranjero que esté dentro de tus puertas, pues en seis días hizo Yavé los cielos y la tierra, el mar y cuanto en ellos se contiene, y el séptimo descansó; por eso bendijo Yavé el día del sábado y lo santificó.”
¿Estás adorando como Dios pide?...es hora de tomar una decisión.
La iglesia que guarda esos mandamientos, incluyendo el cuarto, de Exodo 20:8-11, es la representada por los tres ángeles volando por en medio del cielo...